Es evidente que el Real Madrid tiene el mejor contraataque de toda Europa. Si los de Laso pueden correr la pista son absolutamente imparables. Sin embargo, esa facultad se antoja muy complicada de conseguir cuando llegan los partidos que deciden títulos, como las finales de la Euroliga o de la ACB.
Por eso, el entrenador del Real Madrid se ha puesto como reto personal el poder mejorar los movimientos en ataque estático del equipo blanco. Y eso pasa por una mejor circulación del balón, mayor y mejor aprovechamiento de los pivots y mejores bloqueos para los jugadores exteriores.
Es evidente que en el Real Madrid que se está cocinando, los exteriores seguirán teniendo mucho más peso en el ataque que los interiores, pero el objetivo es que los 'grandes' también sean capaces de aportar en los momentos calientes de los partidos a vida o muerte.
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