El Madrid cumplió con el expediente a pesar de las bajas

El partido de este fin de semana tenía cierto peligro. Más por la situación en la que se encuentra el Real Madrid que por el potencial de su rival, ya que los blancos venían de lograr el jueves una importante victoria ante el Fenerbahçe y el viernes próximo afrontarán un choque fundamental ante el Bayern en Múnich. Además, el equipo de Laso afrontaba el duelo con las bajas de Rudy Fernández, del 'Chapu' Nocioni y Trey Thompkis por lesión, así como la de Ndour por no haber sido dado aún de alta en la Liga Endesa. Por todo ello el objetivo del día era superar el encuentro sin demasiados apuros para cambiar cuanto antes el 'chip' y pensar en la Euroliga.

Sin embargo, el resultado final refleja menos sufrimiento del que ha pasado realmente el conjunto blanco. Los locales comenzaron con fuerza y dejando claro su intención de solucionar el partido por la vía rápida (19-8, min. 8), pero el conjunto murciano aguantó muy bien el tipo gracias a la buena dirección de Carlos Cabezas y el acierto de cara al aro de Thomas Kelati. Así, tras un parcial de 1-11 volvieron a meterse en el partido e incluso en el segundo cuarto llegaron a ponerse con una pequeña ventaja en el electrónico (27-30, min. 14).

El planteamiento de Katsikaris de dos bases con el mencionado Cabezas y Campazzo hizo daño al Real Madrid, aunque los blancos lo supiero contrarrestar poco a poco con el juego ágil y fluido de Luka Doncic. De esta forma, los merengues se fueron al descanso con 8 puntos de ventaja (51-43, min. 20) después de un triple sobre la bocina de Jaycee Carroll. Ventaja que no fue suficiente para evitar que los murcianos dieran un último susto tras la reanudación (58-61, min.28); aunque por fortuna el equipo de Laso supo reaccionar a tiempo y apretó en los 12 últimos minutos, en los que anotó la friolera de 43 puntos.

El principal artífice de este 'empujón' fue Willy Hernangómez, brillante en todo momento en la pintura. Sus puntos por dentro y los de Llull y Carroll por fuera permitieron que el Real Madrid se despegara en el marcador lo suficiente para tener un plácido último cuarto, de forma que el equipo se permitió el lujo de dar minutos a canteranos como Samba y Radoncic. Y es que en cinco días la plantilla afrontará el partido más importante de la temporada en Múnich, del cual dependerá en gran medida su continuidad en la Euroliga, competición en la que es el vigente campeón.