Bertans 'mata' al Real Madrid en un partido de locos

Baskonia 89-Real Madrid 87


Sergio Rodríguez

Sergio Rodríguez




El Real Madrid sabía que hoy no podía haber excusas. La derrota de Olympiacos en Rusia había abierto el cielo de nuevo. Los blancos dependían de sí mismos, y desde el primer instante, la importancia del choque se notó. El Madrid defendió como nunca esta temporada. Rudy fue capital en ataque, y la pelota circulaba con fluidez en ataque. Un 7-15 tras canasta del capitán Felipe Reyes y un triplazo de Nocioni para un 8-19 le daban a los merengues las primeras ventajas. Los de Laso dejaban a Baskonia en 11 puntos en el primer cuarto.

Pero los locales reaccionaron, y lo hicieron desde el 6.75. Bourousis con dos triples seguidos y Mike James acercaban a siete puntos a los de Perasovic (21-28). Era el primer momento duro del Madrid. Laso paraba el partido y el ‘Chacho’ aparecía para meter casi 8 puntos seguidos que de nuevo estiraban el marcador para los merengues. El Real Madrid seguía serio, implicado y controlando en todo momento el encuentro. Hasta Ayón acertaba desde el tiro libre para poner un esperanzador 36-46 al descanso a favor del bando madridista.

La segunda parte pasará a los anales de la Euroliga. Fue el tercer cuarto de Mike James, que remontó el partido el solo con cinco triples sin fallo, de Ayón que sostuvo al Madrid con 10 puntos. Rivers ponía el 64-67, pero Baskonia no dejaba de remar. Bourousis destrozaba por dentro al Madrid y Laso probaba hasta con Taylor de 4. La cuarta falta de Ayón obligaba a Lima a jugar los minutos decisivos y el brasileño no defraudó.

Y el último cuarto fue directamente una locura. El Real Madrid estaba seis abajo 75-69, y Llull se sacaba dos ‘conejos’ de la chistera para meter dos triplazos y empatar. El ‘Chacho’ ponía el 75-78, James el 78-78, Felipe el 78-81. De nuevo, Rodríguez anotaba de tres, el Madrid parecía controlar el partido pero, de nuevo, los últimos minutos fueron ‘matadores’ para los merengues. Tras errar un tiro libre decisivo, Bertans anotaba un triple sobre la bocina que dejaba al Real Madrid derrotado, hundido y casi fuera de la Euroliga. Toca ganar al Khimki para seguir con vida. No cabe otra. Ganar o ganar.