El sueño de la Décima tendrá que esperar

El Real Madrid no pudo con el Fenerbahçe y cayó derrotado por 84-75.


Real Madrid - Fenerbahçe

Real Madrid - Fenerbahçe




Como era de esperar, el Real Madrid se encontró una caldera en Estambul. El pabellón, teóricamente neutral, era una bombona atronadora a favor de Fenerbahçe. Se notó desde el primer momento que en lo ambiental no había color, la proporción era de 99-1 a favor de los turcos.

Tal vez por ese empuje que aportaba la gente, el Fenerbahçe salió a la pista más enchufado. Maniatando al Real Madrid hasta el punto de no dejarle anotar. Sólo Sergio Llull parecía encontrar la fórmula para agarrarse al partido. De hecho, de los 13 puntos con los que llegó el cuadro blanco a la finalización del primer cuarto 11 llevaron la firma del base madridista. Había que cambiar muchas cosas para volver a entrar en el partido (21-13 min.10).

Bien es cierto que el equipo de Laso supo volver al partido cuando más difícil parecía tenerlo. Los blancos llegaron a ponerse 13 abajo (26-13 min.15). Sin embargo, un arreón con tres triples consecutivos del Real Madrid devolvía a los merengues a un partido que tenía pinta de entrar en K.O técnico. Randolph, Llull y Thompkins abrieron en canal el aro local y se arrimaron al marcador (26-24 min.17).

El Real Madrid había podido correr durante varias una pequeña fase de partido y le había servido para entrar en dinámica. Sin embargo, coincidiendo con la lesión de Randolph, que recibió un golpe en el costado y tuvo que dejar la cancha, los blancos bajaron su rendimiento en los últimos minutos del cuarto. Una penalización que terminó siendo de 10 puntos antes de la llegada del descanso (44-34 min.20). 


El tercer cuarto devolvió al Real Madrid a momentos de cortocircuito. Los pívots madridistas se veían superados por los del equipo turco. Especialmente sangrante fue ver cómo Udoh dominaba sobre los interiores del equipo de Laso con canastas interiores…y alguna exterior (52-37 min.27). En el lado blanco, además de Llull, emergió la figura de Carroll, el único faro al que pudo agarrarse el cuadro madridista para no soltarse de forma definitiva de un partido que tenía muy mala pinta (63-50 min.30).

El último cuarto no le sirvió al equipo blanco ni siquiera para meterle el miedo en el cuerpo a los turcos. Sólo la garra de Llull y los puntos de Carroll mantenían a los de Laso en la pelea. El Real Madrid no pudo acercarse a menos de siete puntos (77-64 min.35) y no terminó de dar con la tecla para frenar las canastas fáciles con las que sufrió. El sueño de la Décima para los blancos tendrá que esperar, al menos, un año.