Se avecina lio en el baloncesto español. Representantes de cuatro de los clubes que disputan este año la Euroliga se han reunido en Barcelona para sondear la posibilidad de abandonar la Liga ACB y la creación de una competición a nivel estatal.
En este encuentro han participado Albert Soler, responsable de deportes del Barcelona, Juan Carlos Sánchez, responsable de la sección de baloncesto del Real Madrid, Josean Querejeta, presidente del Baskonia, y Eduardo García, presidente del Unicaja. El enfado viene a raíz de que la ACB no redujo el número de equipos, inicialmente quedándose en 17 durante dos temporadas para posteriormente quedarse en 16. Esto supondría menos partidos y por lo tanto aliviaría los clubes grandes para cuadrar mejor su calendario con la Euroliga. Sin embargo, tras la demanda del Betis, el cuál tuvo que volver a ascender la ACB, sumado a los ascensos de Guipuzkoa y Burgos, han hecho que esta liga ahora sea en vez de 17, de 18 equipos.
Una tomadura de pelo que los grandes clubes no están dispuestos a tolerar y por lo que la idea de fundar una competición aparte entre ellos cada vez coge más fuerza. Además, todos estos acontecimientos han hecho que el que fuera presidente ejecutivo, Francisco Roca, haya dimitido. Un asunto muy delicado y que parece que aún no ha escrito su último capítulo. Lo que está claro es que la ACB no puede permitirse perder de su liga a Real Madrid, Barcelona, Baskonia o Unicaja, a la espera de ver que postura adopta Valencia Basket.
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