Marko Tomas salvó al Real Madrid





Ni Joan Plaza ni sus jugadores querían, bajo ningún concepto, tener el aliento del Partizán cerca. Ni una bocanada ni nada que se le pareciese. Cuanto más lejos, mejor. Con esa consigna saltaron a la cancha los jugadores del conjunto blanco. Un Real Madrid liderado, una vez más, por Felipe Reyes, sacaba pecho ante el ‘baby’ Partizán de los Balcanes.

Los serbios sólo contemplaban la estela del Real Madrid a través del catalejo. El estirón inicial que dieron los blancos al marcador hizo presagiar una noche muy placentera para los de Plaza. Pepe Sánchez dio alguna muestra de su mejor repertorio de asistencias. Pases por la espalda, sin mirar e, incluso, un triple de más de siete metros de distancia que rozó la cúpula del Palacio de Vistalegre y que describió tal parábola que no tuvo más remedio que entrar. Mientras tanto, Felipe seguía anotando y reboteando, Massey brincando sobre los aros, Llull defendiendo y Raúl y Bullock jugando al tiro de precisión.

La novedad del partido fue ver al ‘nuevo Lazaros’ saltar a la cancha. No quiere decir que Papadopoulos haya vuelto a la disciplina del Real Madrid pero su número sigue ‘vivo’ en el vestuario blanco. Quinton Hosley ha cambiado su dorsal habitual, el ‘7’, por el ‘14’ que lucía hasta hace bien poco el jugador griego. No le vendría mal al americano doblar, no sólo su dorsal, sino sus números sobre la pista.

TERCER CUARTO VISITANTE


Los expertos del baloncesto suelen otorgarle mayor importancia al tercer periodo que al último. Los serbios, maestros en el mundo de la canasta, aprovecharon el rayo de inspiración que rozó las muñecas de sus jugadores para, a base de lanzamiento exterior, ir acercándose poco a poco en el marcador. Vistalegre pasó de la relajación a la tensión en poco más de 10 minutos. Mientras Partizán se inspiraba, el Real Madrid se apagaba. Sangrante el tema del tiro libre, en el que Massey, Felipe y Mumbrú se dejaron puntos en camino. Todo quedó abocado a un final ajustado.

Los serbios se olvidaron, definitivamente, de la zona. Todo lo que tuviera un color diferente al parquet no existía para los balcánicos. De esta forma, las bombas de Tripkovic, un jugador que debería vestir de blanco sí o sí la próxima temporada, provocaron un final apoteósico. Una resolución de azar. De casino, más bien. Y el que mejor jugó sus cartas fue Marko Tomas. El croata, de sangre balcánica, se sacó de la chistera un triple de más de siete metros que le daba un punto de ventaja al Madrid. El punto que, a la postre, dio la victoria a los blancos. Una última defensa, en la que Raúl López, sacó manos al más puro estilo pulpo para robar una pelota tan decisiva que puede valer un cruce ‘cómodo’ de cara al futuro.

- Ficha técnica:

68 - Real Madrid (24 12 16 16): Sánchez (7), Llull (3), Tomas (10), Massey (7), Reyes (15) -cinco inicial-, López (6), Bullock (6), Mumbrú (4), Hosley (7) y Hervelle (3).

67 - Partizan (9 15 25 18): Rasic (-), Tepic (6), Lasme (7), Vesely (4), Vranes (2) -cinco inicial-, Tripkovic (22), Velickovic (10), Vitkovac (-), Rakocevic (2), Milosevic (9) y Bozic (5).

Árbitros: Voreadis (GRE), Ryzhyk (UKR) y Lefwerth (SWE). Excluyeron a Vesely (m.36), Lasme (m.40)

Incidencias: encuentro correspondiente a la séptima jornada de la primera fase de la Euroliga 2008-09 disputado en el Palacio Vistalegre ante unos 6.100 espectadores.