Cinco hombres vestidos de blanco con 15.000 guardaespaldas ante cinco blaugranas. La apuesta por el conjunto ante una de las mayores billeteras de toda Europa. Madrileños y catalanes se juegan algo más que la primera victoria en el Top-16. Ambos vienen de conseguir una racha de triunfos consecutivos meritorias. Los blancos, por los que nadie daba un duro a comienzo de temporada, han subido su nivel como la espuma, a pesar de que los últimos contratiempos en forma de lesión en hombres como Pepe Sánchez (que podría abandonar el equipo en breve), Venson Hamilton o Raúl López (se espera que pueda jugar esta noche) retocan las rotaciones de Joan Plaza.
El partido dejará ver duelos individuales de primer nivel. Bullock y Navarro medirán sus muñecas en el tiro exterior, la versatilidad de Mumbrú y Barton se pondrá a prueba tanto por dentro como por fuera, la pintura será una zona donde se repartirá cualquier cosa menos caramelos, con Massey, Felipe, Hervelle y Van den Spiegel portando los ‘guantes’ blancos, y Vázquez, Ilyasova, Santiago y Andersen, los azulgrana. Dos entrenadores jóvenes, además, Joan Plaza y Xavi Pascual, al frente de ambas escuadras. Buena faena para acabar con el run run que no cesa acerca de los planteamientos del técnico blanco. Eso sí, si la moneda sale cruz y el equipo pierde, que se prepare el bueno de Joan porque los tiburones tratarán de devorarle por enésima vez en lo que llevamos de temporada. Sin embargo, más ganas que él mismo de conseguir la victoria no tendrá nadie. Su buen trato le hará brindar el hipotético triunfo ante los catalanes a la afición, uno de sus mayores respaldos.
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