Deporte profesional y literatura en pocas ocasiones encuentran nexos de unión y es menos habitual que un técnico de la elite sea el autor de una novela que nada tiene que ver con el baloncesto, ni con el deporte, ni siquiera de forma colateral en su argumentación.
Ramón Gómez Ponti, de la editorial Sombra, que edita la novela en castellano, fue el encargado de hacer la introducción, aunque la presentación de la obra y del autor la hizo el escritor Juancho Armas Marcelo, que pregonó su madridismo.
Armas dijo de Plaza que había ejercido "el oficio clandestino de escribir cuando todo el mundo duerme" y que en la novela había encontrado a "escritor no profesional con la capacidad descriptiva no sólo del físico de los personales, sino también de su alma".
Joan Plaza, que se emocionó en muchos momentos, sobre todo cuando sus jugadores acudieron a que les firmara y dedicara los ejemplares de su novela, destacó que todo el acto le parecía "excesivo".
"Casi no me creo que me pueda esta pasando esto. Que se presente un libro mío en el Círculo de Bellas Artes, por medio de Juancho Armas Marcelo y que haya tanta gente y tantos amigos. Es difícil para mí, pero me he propuesto vivir este momento", dijo.
El origen del libro viene, según confesó el autor, de un desayuno en su anterior trabajo "cuando era funcionario de prisiones". "Un compañero trajo la carta de un hermano suyo escrita a su madre, en la que le decía todo lo que sentía y no le había dicho verbalmente en los últimos años. A todos nos sorprendió la capacidad de decir cosa escritas y no habladas y decidimos escribir todos un cuento. Los demás desistieron en el empeño, pero yo continué", indicó Plaza.
"De todas formas mi verdadero sueño lo estoy viviendo ahora como entrenador del Real Madrid", insistió Plaza. "Espero que guste la novela. Al principio a los que iban a leer el libro les daba mi teléfono para que me llamaran a la hora que fuese para comentarme qué les había parecido", finalizó Joan Plaza.
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