El factor cancha, clave para decidir el vencedor





La ACB ha recuperado el formato 1-1-1 para los cuartos de final y semifinales de "play-offs", en lugar del tradicional mejor de cinco, algo que no sucedía desde la temporada 95-96, cuando este sistema se utilizó en la primera ronda. Fue entonces cuando se produjeron sorpresas tales como la eliminación del Real Madrid a manos del Caja San Fernando y la del Unicaja frente al TDK Manresa.

Sin embargo, la estadística favorece al conjunto que posee el apoyo del público. Así, en un total de 122 eliminatorias de distintos tipos, en 98 ocasiones salió ganador el equipo con el factor cancha. Esto supone un 80"3 % de victorias cosechadas en campo propio. Ciñéndose a los cuartos de final, de 52 cruces, 42 fueron a parar al equipo local, es decir, un 80"6 %. En 30 de ellos, no fue necesario el tercer partido, siendo un 2-0 el resultado dado en el 57"6 % de las ocasiones. En 12 ocasiones se ha tenido que forzar el tercer choque, suponiendo el 2-1 el 23 %. Tan sólo en 10 eliminatorias se ha impuesto el equipo con el factor cancha en contra (cinco por 0-2 y cinco por 1-2). Además, en 1985-1986, los cuatro conjuntos con el factor cancha a favor solventaron por un claro 2-0 sus series, la única ocasión en la historia del campeonato que se ha producido este resultado.

Por otro lado, en semifinales, de las seis eliminatorias que se han jugado con ese formato, en cinco (83"3%), el éxito ha sido para el poseedor del factor campo, tres por 2-0 y dos por 2-1, mientras que nunca se ha dado el 0-2 y sólo una vez el 1-2, logrado por el Ron Negrita Joventut ante el FC Barcelona en la campaña 1984-1985.