El Real Madrid, como ya informó DC, hizo un primer intento por Prigioni por una cantidad cercana a los 500.000 euros que el máximo responsable del cuadro vitoriano, Josean Querejeta, rechazó de forma inmediata. Su respuesta fue clara: "Al menos, tenéis que ofrecernos el doble de esa cantidad". En ese momento fue cuando el Madrid aceleró la operación por Ricky, y dejó aparcado el tema Prigioni con el objetivo de presionar a Querejeta con el fichaje de Rubio para que diera salida a Prigioni por una cantidad que no superara los 600.000 euros. Sin embargo, el plan se ha venido a bajo por la morriña que al catalán le supondría abandonar su Comunidad Autónoma.
El desenlace del tema Ricky ha contentado a Querejeta que ahora mismo se ve con la sarten por el mango. De ahí que en la última reunión mantenida con Maceiras, Director Deportivo del club blanco, se descolgara pidiendo 600.000 euros y el traspaso de Brad Oleson a cambio de Prigioni. Una locura. El Madrid, en primer término se sorprendió, y decidió elevar su oferta al millón de euros que, en el primer contacto que hubo con el Caja Laboral, se consideró como cantidad oportuna para dejar salir al hispano argentino de Vitoria. Sin embargo, Querejeta se negó en rotundo e instó al Madrid a incluir en la operación de forma inexcusable a Brad Oleson: "Si no incluís a Oleson, no hay acuerdo", le dijo Querejeta a Maceiras. Ahí acabó todo. A comienzos de semana, seguramente entre mañana y el martes, Maceiras volverá a conversar con Querejeta en lo que parece se convertirá en el culebrón del verano en el mundo de la canasta.
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