Con el Barcelona entre turrón y turrón

El domingo espera el clásico





Así, esta semana es la primera de toda la temporada en la que los de Messina no disputan dos encuentros. Hasta ahora, el calendario de la Euroliga y de la ACB les había obligado a jugar un encuentro cada cuatro o cinco días, así hasta disputar un total de 21 partidos en poco más de setenta fechas. En total, un encuentro cada 3,38 días que hace que la plantilla esté en estos instantes en uno de sus momentos de forma más bajos de toda la temporada.

De ahí la imagen dada por el equipo en Vitoria, donde en ningún momento dio la sensación de poder ni siquiera pelear por el encuentro. Algo, que por otra parte, sorprende si se compara con el histórico triunfo logrado a domicilio ante el Panathinaikos, donde el Real Madrid dio probablemente su mejor imagen ante un grande del continente desde mediados de los 90, con Sabonis y Arlauckas.

La explicación de la derrota ante el Caja Laboral viene dada por las apenas 46 horas de descanso que tuvo la plantilla, con un viaje de Atenas a Vitoria incluido. A ello, hay que sumarle la baja de jugadores vitales como la actual de Llull o las de Felipe Reyes y Van den Spiegel a comienzos de temporada; lo cual demuestra que este equipo es ahora mismo un conjunto bajo mínimos.

Por todo esto, el encuentro del domingo ante el Barcelona se presenta tras una semana de descanso y relax para los jugadores. Las fechas navideñas llegan justo en el mejor momento para el equipo, pues las tres derrotas en los últimos cuatro partidos son el síntoma de que hay algo que no está bien. La reflexión y el descanso se presentan, por tanto, como la mejor receta para que los hombres de Messina recuperen las sensaciones de principios de temporada y vuelvan a ser ese equipo casi imbatible de hace dos semanas.


Fuente de la imagen: realmadrid.com