El Madrid ganó en Turquía y se mete en cuartos de la Euroliga

Efes Pilsen 75-77 Real Madrid





Si Messina hubiera escrito un guión cinematográfico para definir un comienzo de partido para su equipo, el Real Madrid, en la pista del Efes no hubiera diferido mucho del que se produjo en realidad. Los blancos salieron desde el comienzo a por todas. Como si no hubiera red a la que sujetarse en forma de partido ante el Maccabi en Vistalegre. Así las cosas, de la mano del mejor Garbajosa de la temporada, los blancos fueron dando pequeños pasos para ampliar el marcador (19-23 min.10).

FICHA TÉCNICA.

EFES PILSEN 75: Tunçeri (7), Thornton (6), Smith (13), Peker (7) y Kasun (13)--cinco inicial--; Arslan (-), Popovic (2), Rakocevic (4), Shumpert (-), Kuqo (2), Santiago (9), y Nachbar (12).

REAL MADRID 77: Prigioni (3), Jaric (10), Tomic (6), Garbajosa (16) y Kaukenas (-)--cinco inicial--; Lavrinovic (11), Vidal (-), Hansen (-), Velickovic (-), Reyes (12), Llull (12) y Bullock (7).


PARCIALES: 19-23, 10-21, 23-12 Y 23-21.

ÁRBITROS: Christos Christodoulou (GRE), Eddie Viator (FRA) y Olegs Latisevs (LET). Eliminaron por faltas personales a Tomic y Kasun del Real Madrid y Efes Pilsen, respectivamente.

PABELLÓN: Abdi Ipekçi Sports Hall. 12.000 espectadores.

INCIDENCIAS: El partido comenzó con unos diez minutos de retraso por un error en el reloj de precisión de la mesa arbitral, que finalmente fue solucionado.

Los turcos, un equipo con un talento incalculable, se perdían en la tela de araña defensiva de los madridistas. Y eso que Kasun, uno de los muchos ex ACB que juegan en este equipo, se empeñaba en batallar bajo los aros como si le fuera la vida en ello. El croata era el único sustento de Efes que se vio sorprendido por el arranque del Madrid. Por si esto fuera poco, Garabajosa decidió tocarse un solo de guitarra como hasta ahora no le habíamos visto en la capital. El de Torrejón plantó la cruz sobre la línea de tres puntos (alguna bastante más lejos) y martilleó a un Efes cuyo físico dificultaba el trabajo por dentro pero facilitaba el exterior. La brecha se fue abriendo de tal manera, que el Madrid se fue al descanso con 15 puntos de ventaja y, lo que era más importante, con un arbitraje muy decente. Espectacularmente decente habría que decir (29-44 min.20).

El Madrid desapareció en el tercer cuarto

Sin embargo, el Madrid mostró su peor cara cuando nadie pensaba que esto sucediera. Los ataques de los de Messina se nublaron como si de la peor de las borrascas se tratara. Además, resurgió de sus cenizas el ex madridista Charles Smith. Un par de triples de la araña devolvieron a los turcos al partido cuando parecían heridos de muerte (48-52 min.28). Y eso que Felipe sacó el escudo y la lanza para batallar como acostumbra y no permitirles a los otomanos acercarse descaradamente (52-56 min.30).

Nadie iba a dejar pasar la oportunidad de vencer el partido. Unos, los blancos, porque de hacerlo daban un golpe a la clasificación y otros, los turcos, justamente por lo contrario. La inercia positiva local hacía presagiar un final de partido costoso para los de Messina. Sin embargo, dos triples, obra de Llull y Jaric, martillearon una buena defensa del Efes. Los minutos finales le sirvieron al Madrid para demostrar que nadie regala nada en Europa y menos los turcos que, Nachbar mediante, estuvieron cerca de darle un buen disgusto a Messina. No fue así y el Madrid cerró su pase a cuartos de final de la competición. El que debe ser su lugar habitual por historia. Ante Maccabi, el próximo jueves, se jugará el primer puesto del grupo. Allí estará en juego buena parte de la Final Four.