La eliminación europea a manos del Regal Barcelona no ha supuesto ningún contratiempo grave para el Real Madrid, pues el propio Messina es consciente de que está envuelto en un proyecto planeado para dar frutos a medio y largo plazo. El italiano sabe que los equipos ganadores no se hacen en cuestión de meses, sino de años, por lo que la temporada 2010/11 está señalada en el calendario como la primera verdaderamente importante en el asalto del Real Madrid a Europa.
Y en este sentido, la intención del club es apostar muy fuerte por jugadores que aunen dos características: ser español y jugar actualmente en la NBA. De esta forma, tanto Rudy Fernández como Sergio Rodríguez se han convertido en los objetivos número uno del equipo de cara a la próxima campaña. Tanto que, según afirmaba este jueves elconfidencial.com, el escolta balear podría encontrarse muy cerca de acabar vistiendo de blanco.
Rudy tiene un año más de contrato con los Portland Trail Blazers, pero el jugador no acaba de encontrarse a gusto y ya ha dejado claro en algún momento que no descarta volver a Europa. En consecuencia, su traspaso depende del agente en EE.UU del ex de la Juventut, Justin Zanik. En el Madrid estarían dispuestos a hacer un esfuerzo valorado en 1,2 millones de euros para traerle, así que ahora sólo haría falta que la franquicia de Oregón aceptara prescindir de un jugador que ha ido perdiendo protagonismo con el paso de los meses.
En cuanto al base canario, el problema reside en el interés de Sergio Rodríguez en triunfar en la NBA. A final de esta temporada acaba contrato con los New York Knicks, por lo que en verano pasaría a ser agente libre y podría firmar por el Real Madrid. La cuestión sería convencer al ex colegial para que abandonase su carrera en los EE.UU para formar parte del proyecto más ambicioso que ha tenido el club blanco en los últimos lustros.
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