"Todavía falta la final y vamos a competir a tope", ha señalado Katsikaris, quien ha sido recibido con aplausos por parte de los periodistas a su entrada en la sala de prensa del Bilbao Arena para hacer frente a la comparecencia ante los medios "más complicada de su carrera".
"Me faltan palabras. Estoy muy orgulloso de ellos porque han creído en mí y además con este público no podíamos perder. Si pudiera abrazar a cada uno de ellos estaría tres días con todos. Se lo agradezco de corazón", ha explicado un emocionado Katsikaris.
El preparador heleno se ha mostrado especialmente satisfecho por haberse sacado "la espina que tenía clavada" desde que la pasada temporada el Alba Berlín les apartó de la final de la Eurocopa en la semifinal disputada en Vitoria.
"Una de las claves para jugar así y eliminar al Madrid era tener muy controlado el vestuario. Los jugadores más expertos han ayudado mucho y no había una euforia tonta. Estaban muy metidos, concentrados en la recuperación y la preparación del partido", ha reflexionado.
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