Ibaka y Pocius salvaron los muebles

Real Madrid 93-89 Spirou Charleroi





REAL MADRID 93: Sergio Rodríguez (5), Suárez (4), Rudy Fernandez (3), Mirotic (12), Tomic (5) --quinteto inicial--, Llull (6), Carroll (16), Pocius (29), Reyes (8), Ibaka (12), Begic (2).

BELGACOM SPIROU 89: Mallet (15), Hamilton (13), Welsch (4), Shengeila (11), Beghin (9) --quinteto inicial--, Green (17), Hill (18), Oveneke (-), Riddick (2).

PARCIALES: 21-27, 27-19, 22-23, 23-20.

ÁRBITROS: Apostolos Kalpakas (SUE). Eliminó a Hill y Welsch por parte del Belgacom Spirou por cinco faltas.


PABELLÓN: Caja Mágica (8.100 espect.)

La visita del Spirou invitaba a pensar en un partido cómodo y sencillo, máxime después de contemplar la paliza que los blancos le propinaron a los belgas como visitantes. Sin embargo, todo fue muy distinto. De hecho, el Real Madrid tuvo que tirar de dos de sus comodines para llevarse una victoria tan importante como sufrida.

De la mano de Pocius (20 puntos) y de Ibaka (12 puntos y ¡¡5 tapones!!)  el Real Madrid se mantuvo siempre en distancias cortas con los belgas, que con un juego anárquico pero muy efectivo le metieron el cuerpo al Real Madrid de principio a fin. De hecho, hasta el último segundo estuvieron a tiro de empatar el partido porque el equipo de Laso no estuvo todo lo fino en los minutos finales que hubiera necesitado para haber acabado ganando de una forma más amplia.

A pesar del sufrimiento, el Real Madrid se sitúa con un balance positivo en la Euroliga de cuatro partidos ganados y sólo dos perdidos. La imbatibilidad en casa se mantuvo, y ahora resta lograr una victoria importante a domicilio para dar un golpe encima de la mesa. La próxima parada será ante un histórico de la canasta, el Armani de Milán.