Real Madrid y Zalgiris Kaunas se medirán en el Palacio de los Deportes en el primer partido del Top 16 en casa. Con un balance de 2-0 y 1-1, respectivamente, blancos y lituanos intentarán poner contra las cuerdas al otro. Los de Plaza, que vienen de ganar al Unicaja en casa y perdieron en el estreno del Top 16 por la mínima en la cancha del Panathinaikos (67-66), intentarán sumar su primera victoria a domicilio en esta fase tras haber perdido en 21 salidas del Top 16 en una década.
En los cuatro últimos partidos que el conjunto lituano disputó en Madrid dos cayeron de lado blanco (86/87 y 07/08) y dos del lado visitante (85/86 y 99/00). En ambos bandos se conocen las armas del otro. Y, sobre todo, se conoce que no hay que dar por ganado ni por perdido nada, ya que cualquiera de los dos equipos puede hacer un roto en el momento menos pensado ya que rendirse no va con sus mentalidades.
Los blancos intentarán desplegar su juego, que encontrará la férrea resistencia del Zalgiris, un equipo muy agresivo en defensa. Como siempre, el dominio del rebote se convertirá en vital para ambos. Laso, consciente de la peligrosidad del rival, ha intentado concienciar a los suyos de la importancia del partido, ya que, a pesar de que ha cambiado el formato, una derrota ahora y en casa podría ser dolorosa a largo plazo.
A pesar de no mirar a un jugador concreto por la larga rotación del rival, se hace impensable no hablar de Popovic, un jugador que mete muchísimos puntos y cuya anotación tendrán que contrarrestar los hasta ahora máximos anotadores del Real Madrid en Euroliga, Rudy Fernández y Jaycee Carroll. Pero lejos de centrarse en uno, los hombres de Laso tendrán que poner toda su energía en hacer una buena defensa colectiva, ya que el Zalgiris además de completo es muy versátil y sus hombres tienen una enorme movilidad, lo que los hace todavía más temibles.
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