Mirotic empezó la temporada como una moto. En la jornada 2 de la Liga Endesa ante el Blancos de Rueda Valladolid se exhibió con 46 de valoración, 26 puntos y 10 rebotes. Una actuación sublime en la que el hispano-montenegrino mostró lo mejor de su repertorio. No es su única gran actuación de la temporada. Ante el Zalgiris en Kaunas también resultó clave al firmar 31 puntos. Sin embargo, en los últimos partidos no se ha podido aprovechar su tremendo potencial ofensivo y el equipo lo ha notado sensiblemente. El juego del conjunto blanco no puede depender exclusivamente del siempre presente Rudy o de la inspiración en el perímetro de Carroll, Sergio Rodríguez o Sergio Llull. De los hombres interiores madridistas es Mirotic el más capacitado para liderar la ofensiva en la pintura y, si es necesario, salir al exterior para probar su lanzamiento de tres.
El conjunto turco no lo pondrá fácil, pero con un Real Madrid en el que todos estén enchufados durante los 40 minutos de juego y que encuentre el perfecto equilibrio entre juego interior y exterior no tiene nada que temer. Porque ,además, el Palacio estará lleno hasta la bandera con un público dispuesto a dejarse la piel y la garganta para apoyar al equipo.
Y en ese Palacio convertido en una sola voz puede ( y debe) brillar Nikola Mirotic, el mejor jugador joven de los dos últimos años en la Euroliga, quien esta noche tiene el escenario adecuado para doctorarse.
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