Sin Martin Odegaard, el Real Madrid Castilla visitaba este domingo al Trival Valderas en Alcorcón con el fin de sumar una nueva victoria, la que habría supuesto la quinta consecutiva. Sin embargo, el colista vendió cara su piel y logró que el filial merengue no pudiera conseguir los tres puntos en un encuentro trabado y de pocas ocasiones de gol. A pesar de que el Castilla intentó hincarle el diente al partido y asedió el área rival, sobre todo en los instantes finales, el premio no llegó.
El partido comenzó con un intercambio de golpes entre los dos equipos, con Juanjo Narváez probando al guardameta rival sin éxito y con el Trival Valderas lanzando un balón a la madera en un lanzamiento de libre directo. El conjunto local trató de llevar el peso del partido en la primera mitad y dispuso de alguna ocasión aislada, aunque sin demasiado peligro. Así, el descanso llegaba con empate sin goles y con la sensación de que ambos equipos seguían tanteándose.
Ya en el segundo acto, el Castilla comenzó poco a poco a hacerse con el mando del esférico y a crear algunas ocasiones. Lucas Torró tuvo la primera nada más comenzar la reanudación con un disparo que sacó in extremis el portero local. Minutos después, llegaba la acción en la que Llorente se llevó un golpe y tuvo que ser retirado del campo en camilla. El Castilla no se resintió y siguió buscando el gol, teniendo Torró otras dos oportunidades en sendos remates de cabeza. Especialmente clara fue la del minuto 75, con el portero batido. Lucas la envió fuera. Así, el Castilla suma un punto más y sigue sin perder fuera de casa, algo que no sucede desde el pasado mes de septiembre.
*Fotos: José Manuel Manzaneque.
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