Los valores madridistas, muy presentes en cada rincón de Valdebebas

El club motiva a sus canteranos con textos e imágenes que recuerdan su historia


Los valores madridistas están muy presentes en cada rincón de Valdebebas




Todos estos aspectos se inculcan en los futbolistas de diversas formas. La más llamativa quizás sea la de los 'pasquines' presentes en las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, ya que el diario 'Marca' asegura que hay un buen número de estos papeles en 'La Fábrica' merengue para que sus jugadores tengan siempre presentes los aspectos que caracterizan al club blanco. Los mismos tienen imágenes de leyendas del Real Madrid como Raúl o Butragueño, así como breves mensajes de motivación y autosuperación personal.

En total hay tres tipos de folios. En el primero de ellos se anima a los jugadores a ser valientes, a arriesgar a dar todo en el campo, a luchar hasta el último minuto y a ser solidarios con sus compañeros. Y es que el Real Madrid pretende que sus canteranos también alimente su espíritu con la fe inquebrantable que ha caracterizado al equipo blanco durante sus casi 114 años de historia.

Junto a estos mensajes también encontramos otros que propugnan el compañerismo, la amistad y el respeto a todo el mundo - incluidos árbitros, rivales y público -; así como la humildad y la potenciación del colectivo. No en vano, los filiales merengues no tienen utileros y encargados de material, por lo que son los propios jugadores los que se encargan de hacer estas tareas según unos calendarios que preparan sus entrenadores.  De hecho, el Madrid también quiere que sus chavales se acostumbren a no poner excusas cuando pierden y que asuman sus errores para poder mejorar y crecer como jugadores y como personas.

Y finalmente hay un capítulo aparte para las cualidades que debe tener un buen capitán. El club pide a sus chicos que estudien y sean buenos compañeros para dar ejemplo al resto del equipo. La filosofía imperante es que el 'jefe' del vestuario debe ayudar siempre a sus compañeros y evitar los conflictos, por lo que así se educa a los niños en Valdebebas. De hecho, el Madrid también quiere que sus chavales se acostumbren a no poner excusas cuando pierden y que asuman sus errores para poder mejorar y crecer como jugadores y como personas. De esta forma la institución se asegura de que, aunque el chico el día de mañana no llegue a jugador profesional, sí pueda presumir de ser una persona íntegra y de profundos valores.