Cinco puntos de los últimos 21 que había en juego. Ese es el triste bagaje del Castilla en los últimos siete partidos, en los cuales sólo ha sido capaz de sumar una victoria (ante el Vecindario) y dos empates (Alcalá y Atlético de Madrid B). El resto, cuatro derrotas a cada cuál más dolorosa, ya que en la mayoría de esos partidos el filial madridista pudo haber logrado un resultado más favorable: Leganés (1-0), Guadalajara (0-2), Lugo (3-1) y Montañeros (2-1).
Con estos resultados, los de Alejandro Menéndez ocupan, con 20 puntos, la 12ª posición. Pero lo más preocupante de todo esto es que el filial está ya a nueve puntos de los puestos de 'play - off' a Segunda (el límite lo marcan ahora el Lugo y el Rayo Vallecano B con 29 puntos), por lo que no puede permitirse más tropiezos si no quiere que se esfume el sueño de jugar en Segunda.
Muy distinta es la trayectoria del Real Madrid C. Los de José Manuel Díaz llevan sumados 15 puntos de los últimos 18, y han perdido tan solo un partido en las últimas seis jornadas (ante el cuarto clasificado, el San Sebastián de los Reyes, por 1-2). Han plantado cara a todos los 'gallitos' del grupo VII de la Tercera División, y ya nadie duda de su candidatura de poder luchar por los puestos de ascenso cuando finalice la liga regular. El segundo filial blanco es ahora séptimo con 24 puntos, a tan solo uno del cuarto, y hace tiempo que dejó atrás su mal comienzo de temporada, en el que llegó a ser el colista.
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