El Castilla no pudo mantener el ritmo

El equipo blanco sucumbió en el Nuevo Arcángel tras una nefasta segunda mitad





El partido comenzó con las ideas claras por parte de ambos equipos. El Córdoba iba a intentar llevar la iniciativa y el Castilla buscar el contragolpe y aprovechar los errores de los locales. De hecho, muy pronto iba a llegar la primera ocasión de hacerlo, en un mano a mano de Jesé con Alberto que el canario desaprovechó con un disparo demasiado cruzado. El error del delantero madridista resultaba extraño, y ponía de manifiesto que no iba a ser un encuentro sencillo para el equipo blanco.

Pronto el Córdoba se hizo con el control del partido, dominando por completo el centro del campo, aunque con escasa profundidad ante un Castilla muy serio y bien plantado. La primera gran ocasión de los locales llegaría en el minuto 19, con un gol anulado por fuera de juego. La jugada fue polémica debido a que nadie tocó el cuero antes de entrar tras un lanzamiento de falta, pero Tomás Mejías se vio despistado por los dos rematadores y el colegiado indicó la posición ilegal. Pedro, el hombre más peligroso del Córdoba durante todo el encuentro, había tenido una buena oportunidad anteriormente, y a posteriori volvió a poner en apuros a Tomás Mejías con un remate ajustadito al palo que se marchó fuera. Jesé respondería más tarde en la otra gran ocasión del Castilla en el primer acto.

El partido se marchaba al descanso con 0-0 por primera vez esta temporada en un encuentro del Castilla. Pero en la segunda parte, el encuentro iba a dar un giro radical contrario al equipo madridista. Y es que el Córdoba se comió literalmente a los de Toril, que apenas llegaron al área contraria durante la reanudación. Durante la segunda mitad, el control del partido fue absoluto por parte de los locales, que aún así hubieron de esperar al último instante para llevarse los tres puntos.

Hasta en tres ocasiones el Córdoba remató a la madera en los segundos 45 minutos. Primero Joselu, más tarde Patiño y finalmente Fernández tocaron los postes de la meta de Mejías, que recibió un auténtico bombardeo. Sólo Casado a falta de diez minutos de juego pudo hacer el gol del Castilla en una pérdida de los locales en el centro del campo. Sin embargo, sería Patiño quien haría el único gol del partido pasado el minuto 90. En un córner y en las postrimerías del partido, una vez más: las dos asignaturas pendientes del Castilla. La racha terminó así en el Nuevo Arcángel, en un partido en el que los de Toril no pudieron mantener su ritmo y en el que, para mayor desgracia, Borja terminó lesionado.