El Castilla mereció algo más

El filial blanco tuvo buenas ocasiones pero no acertó de cara a la meta del Girona (0-0).





Ante el Girona, uno de los equipos sorpresa de la temporada, el Castilla mostró que no se arruga. Desde el inicio del partido, los blancos le quitaron la posesión del cuero a uno de los equipos de la categoría que más viva de ello. De hecho, a los dos minutos de partido Jesé Rodríguez tuvo la opción de abrir la lata con un remate que se le marchó desviado tras una buena jugada de Morata. Por cierto, la presencia del ‘9’ y la de Nacho en la defensa se antoja vital en los objetivos del Castilla de aquí a final de temporada.

Sin embargo, la ocasión más clara del primer acto para el filial la tendrá el propio Morata que, tras un buen arranque de Juanfran desde la banda derecha, remató excesivamente alto un balón que llegaba con mucha fuerza a su bota. Tal vez por eso no pudo precisar el remate que en lugar de encontrar la red se perdió en el nublado cielo de Valdebebas. Eso sí, el tobogán en el que vive el Castilla le permitió crear al Girona una ocasión de peligro en la que Iván González estuvo a punto de sorprender a Jesús, al despejar un balón más próximo a la taquicardia que a la coherencia. El cuero salió rozando el palo de la meta blanca.

El segundo tiempo fue un poco más de lo mismo tanto por una como por otra parte. De hecho, si habláramos de justicia, el Castilla se hubiera tenido que llevar la victoria sumando lo que ambos equipos hicieron a lo largo de los 90 minutos de partido. Álvaro Morata tuvo dos ocasiones muy buenas, que definieron la forma que tiene este jugador de crear ocasiones de peligro. En la primera, quebró a un rival pero su remate con la izquierda lo sacó el portero visitante, mientras que en la segundo consiguió arrastrar a su marcador superándole en velocidad y cuando ya se mascaba el gol, Mallo le sacó la punta del pie de forma milagrosa para tapar el tanto del delantero. Fueron dos de las tres mejores opciones del Castilla en el segundo acto.


Ficha Técnica

Real Madrid Castilla 0: Jesús; Fabinho (Álex 59’), Nacho, Iván, Casado; Juanfran, José Rodríguez (Omar 75’), Mosquera, Jesé; Borja (Lucas 80’), y Morata

Girona 0: D.Mallo, José, García, Herrero, Tébar, Acuña (Benja 62’), Juanlu, Felipe (Vélez 80’), Migue, Luso y Jofre (Jandro 54’)

Árbitro: A.Monescillo. Amonestó a Felipe, Herrero, José Rodríguez, Migue, Mosquera

Estadio: Di Stéfano (3000 espectadores)

Además de Morata, el ‘fichaje’ de Nacho Fernández para la defensa del Castilla fue la mejor noticia para el equipo de Toril. El de Alcalá de Henares fue un muro para el Girona, una verdadera pesadilla, absolutamente insuperable por los jugadores del cuadro visitante. De hecho, gran parte de las opciones de permanencia del Castilla esta temporada pasan porque Nacho se convierta en el líder de la defensa del filial blanco. Sin él, el peligro atrás aumenta. Y eso lo sabe Toril.

El Castilla tuvo varias intentonas finales para llevarse el partido. Sin embargo, la mejor le llegó a falta de pocos segundos de los 93 minutos que se terminaron jugando. Juanfran se sacó un pelotazo desde 25-30 metros de distancia que llevaba más veneno que el de cualquier serpiente. Ahí apareció la mano salvadora de Mallo para evitar que Juanfran se hubiera convertido en el héroe del partido y hubiera hecho justicia con un partido que el Castilla mereció haberse llevado a su zurrón.