"El Madrid, el Kun y el señorío"

Por su interés y actualidad traemos a la portada el artículo firmado por Trompuccini, uno de los moderadores de La Peña DC


Kun Agüero




Ha pasado el tiempo, y la situación emocional de unos y de otros (Atlético y Real Madrid) ha ido cambiando. Los Atléticos han pasado de una gran decepción y un enorme rechazo por el traspaso al Madrid, en un principio, a la aceptación de los hechos y al deseo de que el dinero del Real Madrid llegase cuanto antes a su Club. Ese momento era idóneo para haber concretado el traspaso.

Sin embargo, por razones que los aficionados de a pie no podemos entender, pasa el tiempo, demasiado tiempo, y la contratación no llega a hacerse efectiva. Esto, en mi modesta opinión, nos ha metido en una situación delicada. Veo al menos dos razones por la que esta demora nos puede perjudicar. Una tiene que ver con la citada evolución emocional de la masa atlética. Si queremos mantener una relación razonablemente correcta con el Atlético y su gente, está empezando ya a pasar el momento adecuado de hacer la contratación.

Días atrás en los foros atléticos imperaba la opinión de que lo mejor era que el Madrid diese el dinero y la operación se realizase cuanto antes. Ahora eso está cambiando. Los Atléticos empiezan a concebir la idea de que el Kun quizá no se vaya al fin. Se están ilusionando con la posibilidad de volver a verlo de rojiblanco. Cuanto más tiempo pase, ese sentimiento se irá arraigando más y más. Si en ese momento se cerrase la contratación por el Madrid, la reacción emocional atlética sería de rabia doble, cuando unos días antes era de razonable aceptación.


La otra razón es que tanto en el periodismo como en la afición se está instalando una idea, que el Real Madrid está dejando tirado al Kun Agüero. Sería absurdo tratarnos a todos de tontos, negando ahora que el Madrid haya tenido algún tipo de contacto con el Kun. Es muy evidente que el contacto ha existido. Si el Kun a final de temporada se lanzó a mandar un mensaje al Atlético, diciendo que ya no seguiría, poniendo en marcha un proceso pactado con el Real Madrid, nosotros estamos en la OBLIGACIÓN MORAL de seguir ese proceso hasta el final.

El concepto de señorío, de tan indefinido significado en algunos momentos, ahora explota con todo su sentido. Si el Madrid pactó con el Kun, ni la operación Neymar ni ninguna otra circunstancia, pueden justificar que ahora el Madrid no siga adelante, dejando en la estacada a Agüero. Es cuestión de honor y de imagen. La palabra de un caballero vale tanto como su firma. Y como quiera que nuestro himno nos define como “caballero del honor”, ahora le toca al Presidente y a sus ejecutivos terminar lo que se ha empezado.