Durante el Mundial de Brasil, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, recibió la llamada de Quico Catalán. Ambos presidentes habían quedado de acuerdo en que el Levante informara de cada oferta recibida por Keylor Navas. Hasta las oficinas del club levantinista llegaron propuestas de Oporto, Benfica o Atlético, pero ninguna de ellas del calibre del Bayern Múnich. En cuanto Guardiola pidió el fichaje del costarricense, Catalán llamó a Florentino inmediatemante.
El Bayern iba en serio a por Keylor y tenía la intención de pagar la cláusula del jugador, al que ofrecía cinco años de contrato. Algunos medios llegaron a dar casi por oficial la llegada del portero al Allianz Arena. Pero Florentino Pérez tenía el as en la manga de la buena relación con Catalán y de que Keylor prefería permanecer en España.
El Real Madrid le prometió al Levante pagar los 10 millones de la cláusula del portero y comenzó a negociar con Keylor, ofreciéndole seis años de contrato. El costarricense no se lo pensó y escogió al Real Madrid, su sueño desde niño. Como 'pago' por el favor, el Real Madrid traspasó a Jesús Fernández al Levante. Y todos contentos, menos Guardiola...
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