Una pelea entre el Frente y Riazor Blues avergüenza y asquea al fútbol español

Un aficionado de 43 años ha fallecido tras recibir un golpe y caer al Río Manzanares





El grave enfrentamiento se ha producido al filo de las nueve de la mañana en las proximidades de la zona denominada 'Madrid Río', a unos centenares de metros del Vicente Calderón. Según las investigaciones policiales miembros del Frente Atlético y de los Riazor Blues se han citado via 'WhatsApp' en los aledaños del estadio para pelearse en los momentos previos al encuentro. Además, al encuentro también han acudido miembros de la Peña rayista de 'Los Bukaneros' y de la Peña del Alcorcón 'AlkorHooligans'. El resultado de esta vergonzosa 'cita' ha sido una batalla campal en la que han participado varias decenas de personas y que se ha saldado con un fallecido y una docena heridos leves, algunos de ellos por arma blanca.

Al parecer el fallecido es un aficionado gallego de 43 años de nombre Francisco Javier Roberto Taboada, casado y padre de un hijo, que tras ser golpeado ha caído al Río Manzanares. Tras ser rescatado por los bomberos de la Comunidad de Madrid ha sido trasladado en parada cardiorrespiratoria al hospital Clínico de la capital. En un principio ha logrado ser reanimado, pero tras su ingreso ha fallecido poco después de las dos de la tarde a consecuencia del traumatismo cranoencefálico que presentaba y de la hipotermia que le había causado su caída al río.

Tras lo ocurrido la Liga de Fútbol Profesional (LFP) ha intentado ponerse en contacto con la Real Federación Española (RFEF) con el objetivo de suspender el partido. Sin embargo según la LFP no han conseguido establecer comunicación, por lo que la decisión no se ha podido tomar y el encuentro se ha disputado en una evidente clima de tensión y malestar entre los aficionados. Los propios aficionados rojiblancos han recriminado lo ocurrido a miembros del Frente Atlético presentes en el feudo colchonero, aunque por suerte no se han producido más incidentes de gravedad.

De esta forma se repite 16 años después lo ocurrido con el aficionado vasco Aitor Zabaleta, quien murió en 1998 tras una pelea con aficionados ultras del Atlético de Madrid. Por lo que parece a pesar del tiempo el fútbol español sigue sin aprender y ahora toca volver a lamentarse de este gravísimo hecho. Ante ello no cabe otra que la condena y el trabajo para erradicar la violencia en el fútbol, aunque el presidente Enrique Cerezo ha sido bastante tibio en su comparecencia tras el partido. El directivo ha centrado sus esfuerzos en destacar que lo sucedido "no ha tenido nada que ver con los clubes ni con el fútbol" y ha dejado claro que lo ocurrido "ha tenido lugar muy lejos del estadio", aunque el incidente ocurrido a unos centenares de metros del Vicente Calderón. Pero de lo importante, de la política de su club relacionada con sus aficionados ultras, nada de nada. Flaco favor el suyo al fútbol, porque ahora no es momento de lavarse las manos, sino de actuar.