Se dispara el cagómetro en Barcelona

Barcelona 1 - 2 Rubin Kazan





Y esto se veía venir. El conjunto entrenado por Pep Guardiola ha venido practicando un  fútbol lamentable desde que diera comienzo la temporada, y ante el Rubin Kazan ha recogido los frutos a su pésimo trabajo en este último mes. Ya mereció perder ante el Valencia y el Inter. Incluso el Almería mereció sacar algún punto del Campo Nuevo. Pero antes los rusos han recibido lo merecido, y cosecharon una más que merecida.

LOS JUGADORES VAN DE SOBRADOS

Y es que este equipo sigue contagiado de los éxitos cosechados la temporada pasada, y afrontan los partidos con mucha menos intensidad que lo que se vio el pasado año. Buen ejemplo de ello es Messi. La empanada mental que sufre este chico es de récord Guinness y, casualidades del destino, ha tenido que ser Maradona, un genio como futbolista y un cafre como entrenador, el que nos ha descubierto las limitaciones futbolísticas de este chico, al que se le ve demasiado acomodado tras los elogios recibidos en los últimos meses.

Se le torcieron las cosas al Barcelona desde los primeros instantes del partido merced a un tempranero gol del Rubin. Ryanzantsev, de fuerte disparo desde fuera del área, sorprendió a un Víctor Valdés que si no le disparan al cuerpo, como el último fin de semana en Valencia, es incapaz de detener cualquier disparo que se le complique lo más mínimo.


FICHA TÉCNICA

1 - Barcelona: Valdés; Alves (Sergio Busquets, min.90 2), Piqué, Márquez (Keita, min.80), Abidal,ouré Touré Yaya, Xavi, Iniesta, Messi, Pedro (Bojan, min.66) e Ibrahimovic.

2 - Rubin Kazan: Ryzhikov; Salukvadze, César Navas, Sharonov, Cristian Ansaldi; Kasaev, Cristian Noboa, Semak (Murawski, min.43), Ryazantsev (Kasaev, min.83); Karadeniz; Domínguez.

Goles: 0-1: Ryazantsev, min.2. 1-1: Ibrahimovic, min.48. 1-2: Karadeniz, min.73.

Árbitro: Laurent Duhamel (FRA). Mostró tarjeta amarilla a Iniesta (min.45), Murawski (min.78) y Ansaldi (min.90).

Incidencias: Partido de la tercera jornada del Grupo F de la Liga de Campeones disputado en el Camp Nou ante 55.930 espectadores.

NO JUEGAN A NADA

Tras el tanto inicial, se vio al Barça dominador de siempre, pero la pelota circulaba más despacio que un Toro Rosso en la Fórmula Uno. Andrés Iniesta, uno de los futbolistas clave de este equipo, no acaba de coger la confianza necesaria para brillar tras su lesión muscular, y es una sombra de sí mismo. Dani Alves, estéticamente es más guapo tras su operación de orejas, pero sus limitaciones futbolísticas volvieron a quedar en evidencia.

Y luego está la 'dupla de oro', Messi e Ibrahimovic. El argentino, como ya hemos mencionado antes, da pena verle. Es un fantasma sobre el campo, al que el triplete, el Balón de Oro y todas esas milongas le han dejado en fuera de juego. Y el sueco parece el primo de tonto de Eto'o. Ni presiona, ni se desmarca, y tampoco asume responsabilidades en el juego. Eso sí, marcó el tanto del empate que le sirve a este sobrevaloradísimo jugador seguir viviendo del cuento al menos un mes más.

EL FÚTBOL FUE JUSTO CON EL RUBIN... Y EL BARÇA

Pero el fútbol, aunque muchas veces no sea la norma general, fue justo con el Rubin Kazan. Y a falta de 13 minutos para la finalización, un rápido contragolpe de los rusos es culminado con Karadeniz, lo que dejó mudo a todos los culés del Campo Nuevo. Una bofetada en toda regla que devuelve a la tierra a un club en el que jugadores, directivos, entrenador y aficionados vivían todavía bajo los efectos del triplete de la temporada pasada. Y eso, por mucho que les duela, ya es historia...