El Inter - geriátrico no fue rival

José Mourinho ha quedado retratado en la noche de hoy. El portugués, que pretendía el pasado verano ser el entrenador del Real Madrid (menos mal que Valdano y Florentino le cerraron las puertas) ha sacado esta noche en el Campo Nuevo una alineación que es un insulto al fútbol, con ocho jugadores de corte defensivo cuya validez para jugar en el fútbol de elite ha quedado puesta en duda tras el bochorno visto durante el partido.

¿QUÉ HACE MOTTA JUGANDO AL FÚTBOL?

Entre ese 'club de amigos' que intentaba frenar las acometidas del Barcelona se encontraban personajillos sospechosos en este mundo del fútbol como Motta o Zanetti. El primero de ellos, que volvía también al Campo Nuevo después de hartarse a partir piernas  todas las semanas en el fútbol italiano, se pensó que había vuelto a fichar por la entidad culé, y puso en bandeja el primer gol culé en el min. 10, obra de Piqué, al dejar que el central le ganara la espalda como si la cosa no fuera con él.

Con 1-0 en contra, al bueno de 'Mou' y su equipo de tuercebotas se le vino todo el plan abajo. Porque, con un centro de campo formado con Stankovic, Cambiasso, Zanetti más el mencionado Motta, ¿quién narices podía surtir de balones a Diego Milito y Eto'o, desasistidos toda la noche?. Al técnico portugués, que fue a por el 0-0 desde el primer minuto, se le vinieron todos los planes abajo desde el comienzo, lo que permitió que Xavi, Iniesta y compañía marearan al equipo contrario como si un partido de solteros contra casados se tratase.

JULIO CÉSAR HACE EL RIDÍCULO EN EL SEGUNDO GOL

Y así transcurrían los minutos hasta que, en la única jugada decente del encuentro, Xavi abrió a banda a Dani Alves, quien puso un balón en bandeja a Pedrito para que batiera de tiro cruzado a Julio César, cuya estirada parecía más propia de una persona de tercera edad. Corría el minuto 26 y, desgraciadamente para los amantes del fútbol, el partido estaba finiquitado.

A partir de entonces, el Barcelona volvió a jugar al tran - tran de los últimos partidos, y el aburrimiento volvió a hacerse dueña de las gradas del Campo Nuevo. Y no solo se aburrió la gente, sino que también se empezaron a ver algunas de las limitaciones (y graves) que tiene el equipo de Pepe Guardiola. La primera de ellas, y ya un habitual en esta sección, son las clases de canto de Víctor Valdés. El portero, que lleva la palabra 'sobrao' grabada en la frente, intento regatear en su área a Diego Milito, casi se lleva un susto que casi vale el primer tanto interista.

El siguiente cáncer que salió a la luz en la noche de hoy fue Thierry Henry. El heredero de Michael Jordan apenas tuvo ocasión de lucir sus excelentes cualidades manuales en la noche de hoy. Y eso que hoy jugó en la posición que se hizo famoso, en la de delantero centro, y con la que tuvo sus más o menos con Samuel Eto'o, desaparecido en combate en la noche de hoy.

BUSACCA SE UNE A LA FIESTA

Viendo que el partido estaba alcanzando unas dosis de aburrimiento impropias de una competición de prestigio como la Champions, el árbitro, Massimo Busacca, quiso llevarse su dosis de protagonismo al dejar sin señalizar dos claros penaltis sobre Samuel Etoó. El primero de ellos, cometido por Puyol, ocurrió cuando agonizaba la primera parte, al empujar por detras al camerunés justo cuando se disponía a rematar a portería.

Dani Alves, futbolista de profesión y delicuente de vocación, realizó otra pena máxima sobre su ex compañero, que el árbitro dejó de señalizar. No sabemos si Platini habrá visto el partido, pero estamos seguros de que Busacca arbitrará la final del Bernabéu del 22 de mayo.

En conclusión, el Barcelona, ayudado por el empate sin goles del Rubin Kazan, y por Platini y sus amigos los árbitros, se ha colocado primero de su grupo, con 8 puntos, dos por delante de Rubin Kazan e Inter de Milan y tres del Dinamo de Kiev, su próximo rival. A pesar del ambiente de euforia que se vive en la Ciudad Condal por este resultado, los de Guardiola están obligados a puntuar (o perder por un gol) en Ucrania si no quieren que el sueño de la cuarta Copa de Europa se acabe antes de tiempo.