El fin de ciclo está en marcha

El tiempo de alegrías y jolgorio en Barcelona toca a su fin





De esperpénticos se pueden calificar los halagos recibidos por el equipo entrenado por Guardiola tras caer con todo merecimiento ante el Barcelona en la Copa del Rey. A pesar de la excesiva verborrea favorable a los blaugrana, estos halagos indican una cosa: la prensa catalana es consciente de que el Barcelona siempre ha sido el equipo segundón de la Liga Española, y han vaciado su vocabulario de piropos ante la previsión de que la sala de trofeos del Barcelona vaya a permanecer cerrada una buena temporada.

Porque el considerado mejor equipo de todos los tiempos fue incapaz de superar la ronda de octavos de final de la Copa del Rey. Algunos listos se apuntarán el tanto del Alcorconazo, que ya nos lo vemos venir, pero basta recordar que el Madrid, en lo que llevamos de temporada, nunca se ha considerado  mejor que nadie, y no va por ahí presumiendo de los éxitos del pasado como sí han ido haciendo Laporta, Begiristain y compañía desde que ganaran la Champions.

Pero la prepotencia que hay instalada en Barcelona no es el principal problema que tiene ese club. El equipo de Guardiola no es el mismo del año pasado. Sus jugadores están fundidos físicamente fruto de una pésima planificación deportiva que ha dejado a la plantilla culé altamente descompensada. Además, el juego no es tan brillante como el de antaño, y los bostezos ya se han apoderado del público del Campo Nuevo en varias ocasiones.

UNA PLANTILLA DE LO MÁS LIMITADA


Luego está el deplorable estado físico de algunos de sus futbolistas. Chygrynskiy no está ni para jugar en Segunda División, la cintura de Márquez no podría participar ni en el Mira Quien Baila... Hasta a Xavi se le más apagado en su fútbol respecto a campañas anteriores. En definitiva, una plantilla corta de efectivos que, si el Villarato no lo remedia, acabará hundida físicamente cuando los blaugrana tengan que compaginar Liga y Champions.

Porque si el Barcelona está ahora mismo por delante del Real Madrid es, qué casualidad, por las ayudas arbitrales. Como ya informamos en Defensa Central, los siervos de Villar han regalado al Barcelona hasta un total de siete puntos. Tal es el atropello que ha habido que, de haber transcurrido la competición con normalidad, el Madrid debería tener seis puntos más que el Barcelona. Pero, como ya hemos defendido en más de una ocasión, el tiempo siempre pone a cada uno en su sitio. Y el del Barcelona, en sus 107 años de historia, ha sido siempre el de ir detras de un equipo que viste de blanco...