Según publica este martes elconfidencial.com, los árbitros de la Primera División habrían decidido denunciar al técnico culé al Comité de Competición por acusar de metirosos al colegiado Clos Gómez como a su ayudante en el Almería-Barcelona. Y es que, según el trencilla, el catalán le dijo que estaba "pitando todo al revés"; algo que Guardiola niega de forma rotunda.
Sin embargo, lo curioso es que el propio entrenador comentó también al respecto que "he visto las imágenes y no estoy demasiado orgulloso. Viéndolas puedo entender la expulsión, no me gusta verme así. Habrá más, porque me conozco. Yo intento poner cordura por la institución que represento, pero a veces el arrebato me puede y me expulsan". Por consiguiente, él mismo admite haberle dicho algo grave al árbitro y meritorio de la expulsión.
Por todo ello, el colectivo arbitral habría presentado una petición por escrito al Comité de Competición para que el entrenador culé sea sancionado más duramente. Para los colegiados el partido de castigo que Guardiola se tuvo que perder ante el Valencia es insuficiente, por lo que pretenden que éste se vea ampliado o, cuanto menos, derive en un expediente. El Comité se reúne este mismo martes, pero el favoritismo del que goza el Barcelona dentro de la Federación y de las altas instancias españolas hace complicado que se tome una decisión perjudicial para los intereses azulgranas. Aunque eso sí, lo que parece claro es que los árbitros ya no están dispuestos a pasarle una más al ex jugador barcelonista.
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