Comienza la semana del cagómetro culé

El Barcelona se juega su futuro tanto en la Euroliga como en la Champions





La pesadilla blaugrana dará comienzo este martes en Vistalegre ante el equipo de Ettore Messina. Con 1-1 en la eliminatoria, los de Xavi Pascual han tenido que comerse con patatas la prepotencia con la que afrontaban esta eliminatoria, y ante los blancos van a tener que vivir una situación límite: ganar alguno de sus dos partidos en la cancha madridista para poder seguir aspirando a disputar la Final Four de la Euroliga. Si el equipo de baloncesto con más presupuesto de Europa resulta que ni siquiera puede aspirar a conquistar el máximo cetro continental, es que entonces tienen un problema muy gordo. Y se empezaron a dar cuenta el jueves, cuando Tomic les hizo un ovillo en el Palau Blaugrana.

Pero 24 horas después del más que posible segundo varapalo europeo de los blaugrana, los de Guardiola se medirán en el Emirates Stadium de Londres al Arsenal, posiblemente el rival más serio que hayan tenido en la Champions en la presente edición. Y como era de esperar, las ventas de Kleenex se han disparado en Barcelona no por las alergías, sino para secarse las lágrimas que les provoca el pensar que van a tener que afrontar toda la eliminatoria sin Iniesta, que esta temporada ha estado más bien desaparecido. ¿Se imaginan a los madridistas llorando si se lesionara Higuaín? No, ¿verdad? Será cuestión de 'feeling', como diría Guardiola.

Y el jueves, el megaproyecto de Lapuerta para su sección de baloncesto puede desmoronarse en completo en Vistalegre, si finalmente se producen las dos victorias de los de Messina en su campo ante el eterno rival. Y, de todas formas, si no se consiguieran, los barcelonistas no podrían respirar tranquilos, ya que los blancos han sido el único equipo que ha ganado al Barcelona en el Palau esta temporada. Y si ya lo han hecho una vez, ¿por qué no una segunda?