A la búsqueda del sueño de octavos

Eslovenia - Estados Unidos (16:00 h.)





Tras la disputa de la primera jornada, y contra todo pronóstico, la selección eslovena lidera el grupo C, gracias a su victoria por 1-0 frente a Argelia, y tras el empate entre las dos favoritas, Inglaterra y Estados Unidos, una victoria les daría el billete para la siguiente ronda. Bajo la batuta de Matjaz Kek, los eslovenos parecen estar viviendo un sueño del que no quieren despertar. Han conseguido codearse en la elite del fútbol mundial, venciendo a selecciones mucho más poderosas, como Rusia, a la que ganó en la repesca para el Mundial, o la República Checa.

Con un fútbol muy sobrio, sin fisuras entre líneas y con una defensa asfixiante que comienza la presión en la delantera, Kek ha conseguido crear un bloque donde brilla la cohesión y donde lo colectivo se antepone a la escasa calidad individual que atesora la plantilla. El seleccionador esloveno repetirá el once que doblegó a Argelia, con la formación clásica 4-4-2, en el que el central Marko Suler volverá a ser la referencia defensiva, por detrás de una línea de cuatro centrocampistas, donde el talentoso Valter Birsa gozará de libertad de movimientos. Arriba, los delanteros Milivoje Novakovic y Zlatko Dedic, serán los encargados de taponar la salida del juego rival y cuya movilidad será decisiva para facilitar la llegadas de los mediocentros desde la segunda línea, principal arma ofensiva de los eslovenos.

ALINEACIONES PROBABLES

ESLOVENIA: Handanovic; Brecko, Suler, Jokic, Cesar; Koren, Radosavljevic, Kirm, Birsa; Novakovic, y Dedic.


ESTADOS UNIDOS: Howard; Cherundolo, Onyewu, Bocanegra, Demerit;  Bradley, Clark, Donovan; Dempsey, Buddle y Altidore.  

ÁRBITRO: Koman Coulibaly (Mali)

ESTADIO: Ellis Park.

HORA: 16.00/Canal Liga

ESTADOS UNIDOS Y LA VICTORIA COMO ÚNICO OBJETIVO

Con la vitola de favorito, el combinado estadounidense llega a la segunda jornada del Mundial obligado a ganar sino quiere decir adiós a Sudáfrica, máxime tras su empate (1-1) ante Inglaterra, donde los de Capello fueron superiores, pero la fortuna jugó del lado de los de Bradley. El seleccionador de las 'Barras y estrellas' mantiene el bloque que se proclamó subcampeón de la Copa Confederaciones, después de eliminar a España, en un partido donde los americanos maniataron a la perfección todas las posibilidades del juego de los campeones de Europa.

Bob Bradley ha construido una selección desde los cimientos, estableciendo como base una férrea solidez defensiva, fundamentada en la extraordinaria condición física de sus futbolistas, entre los que destacan la pareja de centrales formada por Bocanegra y Onyewu, guardianes de la portería que defiende el cancerbero Tim Howard, un seguro de vida para los americanos. Con un 4-4-2, Estados Unidos es un equipo sin extremos, en ocasiones demasiado estático y que abusa en exceso de jugar por el centro, apoyándose siempre en una rápida salida de balón por parte de Bradley, Donovan y Dempsey, que buscan constantemente la velocidad y la potencia de Jozy Altidore y Edson Buddle.