El Clásico del miedo

No llegan en el mejor de los momentos ni Barça ni Athletic, pues los blaugrana cedieron ante el Arsenal en la ida de los octavos de 'Champions' (2-1) cuando parecían tener controlado el partido, mientras que los 'leones' cayeron en el campo del Mallorca en la pasada jornada de Liga (1-0).

Por ello, el Barça tiene casi la necesidad de ganar para  olvidar también el tropiezo en El Molinón (1-1) ante el Sporting de  Gijón, que propició que la ventaja al frente de la tabla sobre el Real  Madrid bajara de los siete a los actuales cinco puntos. No será igual  para el Athletic, ya que la derrota en Mallorca cortó una excelente  racha de resultados.

Todavía sin Carles Puyol, que deberá forzar para estar disponible  cuanto antes --sobre todo para la vuelta contra los 'gunners por la  sanción de Piqué--, ni Jeffren, el técnico Josep Guardiola afronta su partido número cien en el banquillo blaugrana en Liga BBVA con la  esperanza de contar con David Villa, que el viernes no se entrenó por  una contusión en el tobillo izquierdo.

El Athletic quiere ser el mismo de la Copa

El Athletic Club es consciente de que puede ser la víctima  propiciatoria que pague los platos rotos del conjunto culé. Pero acude  al Camp Nou dispuesto a plantar cara a los de Guardiola como ya lo hizo el pasado mes de diciembre en el empate sin goles cosechado en la  eliminatoria de Copa, en el que supo maniatar el juego de toque del campeón.

Pero más allá de que ese encuentro pueda servir o no de referencia, lo que tienen claro los rojiblancos es que deben saltar al coliseo  blaugrana con el mismo hambre de triunfos que han venido haciendo hasta ahora y que le ha colocado en una situación privilegiada en la tabla, en puestos de UEFA Europa League.

Los de Caparrós confían en recuperar las buenas sensaciones que  ofreció el equipo antes de la derrota de Mallorca, que ha escocido  especialmente en el seno de la plantilla, ya que cortó una excelente  racha de cuatro triunfos consecutivos.

Pero a pesar del tropiezo del Iberostar, la confianza del vestuario y las opciones europeas del equipo se mantienen intactas para encarar un choque en el que todo lo que intente hacer el Athletic sobre el césped debe rozar la perfección. Cualquier pequeño error se paga muy caro, amén de rezar para que los Messi, Villa, Iniesta, Xavi y Alves no tengan su día.

Los once jugadores rojiblancos que se encargarán de frenar el  potencial del Barça son secreto de sumario hasta que dé  comienzo el choque. Joaquín Caparrós, que recupera a Gurpegui tras cumplir un partido de sanción, tiene perfectamente definido su equipo titular pero oculta sus cartas e incluso guarda un as en la manga. Y es que, cabe la sorpresa de que Fernando Llorente comience el partido desde el banquillo, una apuesta nada arriesgada, teniendo en cuenta que el ariete riojano ya faltó a la cita copera de diciembre por lesión.