La caverna culé habla de corrupción en la RFEF

Se habla del arbitraje de Vallecas y una vez más se omite todo lo que no interesa





Para la caverna culé, sólo existen las ayudas al Madrid. No ven otras cosas. Son capaces de inventarse manos inexistentes como la de Higuaín en Mestalla o de acusar a los madridistas de lesionar a los rivales (caso de Ramos y Vadillo en el Madrid-Betis), pero nunca lo serán de ver más allá de sus propias narices. Es cierto que Fernández Borbalán no estuvo acertado, pero una cosa es esa y otra tratar de extrapolar un mal arbitraje al resto de la temporada. Por ahí no vamos a pasar, más que nada porque el único que se ha visto favorecido escandalosamente esta temporada ha sido el Barça...

Está claro que está Liga va a ser blanca y bien hará el Barça en centrarse en otras competiciones con más opciones de éxito como la Copa y la Champions. Donde no llegue el equipo de Mourinho lo hará el colegiado de turno. Ayer el líder sesteó y jugó un partido horrible, pero le salvó otro escandaloso arbitraje.

Sí, el Barça debería centrarse en la Copa y en la Champions. No olvidemos que en ambas competiciones los culés son insuperables. No olvidemos el escándalo del clásico del Camp Nou, la mano de Pinto en Mestalla o lo ocurrido en Europa en los últimos años. Engañar a la gente no está bien, amigo Zárate, y tragarte tus propios embustes significa tener poco coco. De todos modos, que al Barcelona le ayuden en Copa y Champions no quita que la Liga también sirva para demostrar que el Barça no gana sin ayudas. Si no que le pregunten al Atlético de Simeone.

Una auténtica vergüenza para el fútbol y para el Real Madrid, ese con el que muchos se llenan la boca presumiendo de valores como el señorío o el 'fair play'. Lo peor es que nadie pone freno a Pepe, un jugador violento y antideportivo que no dudó en dedicar la pírrica victora de su equipo al grupúsculo de ultras merengues que acudieron a Vallecas.

Ahora la prensa culé se indigna porque Pepe celebra las victorias con los aficionados. Hay que ver qué mal está la gente. Cuanta antideportivivad hay en este central, es poco menos que el anticristo. En Barcelona, sin embargo, los Alves, Mascherano y Busquets son unos santos. ¡No dan una sola patada, oiga!

Pepe ofreció todo su repertorio de malas artes. Fingió lesiones, agredió sin contemplaciones a su paisano Diego Costa e incluso lanzó un descomunal pelotazo a un sector de la grada lateral de Vallecas, que le gritó "¡asesino, asesino!".

Después de leer esto, encuentro los motivos por los que Pepe y Messi llevan el mismo número de cartulinas. Será que no son tan diferentes: uno es más alto que el otro, el otro es delantero, el anterior es más moreno... pero, por lo que parece, los dos saben dar pelotazos al público. La única diferencia está en la forma con que se mira a uno y a otro, especialmente en la caverna. Ahí no va a verse ni una sola crítica al argentino, mientras que al portugués van a seguir comparándolo con el demonio. Cosas de la vida. Lo de fingir, debe haberlo aprendido en tantos y tantos clásicos viendo a Busquets, Alves y compañía. ¡No hay mejor compañía de teatro!


'¡Corrupción en la Federación!' se escuchó por todo Vallecas para mostrar la indignación de los seguidores vallecanos con el arbitraje que estaba recibiendo el Rayo Vallecano y la permisividad que tenía el Real Madrid, con Pepe y Sergio Ramos a la cabeza. Dos jugadores que tenían que haberse ido al vestuario antes de la media hora, pero que acabaron el encuentro festejando una victoria tan injusta como polémica. 

Corrupción en la Federación es lo que hay desde hace años, pero por los favores al Barcelona. Tratar de darle la vuelta a la tortilla resulta ridículo después de ver la enorme retahíla de favores que se han llevado los azulgrana. A pesar de los intentos de la caverna por ocultarlo, no somos tontos y hemos visto muchas cosas que demuestran que hay mano negra a favor de los culés. La última prueba, el gesto de Pérez Lasa a Messi en el Calderón para que tirara con el portero colocando la barrera. De eso no dirá nada nuestro amigo Óscar Zárate, que ya se habrá comprado una venda para no ver la realidad...