"Tuve ganas de chulear a Florentino"

El presidente del Barcelona demuestra el seny y los valores culés





Rosell decidió dar rienda suelta a su vanidad y prepotencia en declaraciones para la televisión catalana Esport 3, donde demostró que en Barcelona no sólo no saben perder, sino que tampoco saben ganar. Y es que, en lugar de felicitar a Leo Messi por su conquista y de alegrarse por él, el carácter del barcelonismo conlleva no alegrarse por ganar títulos o premios, sino únicamente porque no los haya ganado el rival. Patético. Como lo fueron las palabras de Rosell restregando el cuarto Balón de Oro de Messi al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.

"No sé si el ciclo que está viviendo el Barcelona se repetirá en el futuro. Seguro que algún día va a acabar, pero vamos a intentar que dure lo máximo posible. Que Messi gane su cuarto Balón de Oro es como ganar la Champions. Es tan importante que me han dado ganas de hacerme un poco el chulo con Florentino Pérez. Estoy muy orgulloso de ser del Barça", espetó. Palabras que sin duda chocan con el señorío, la humildad y los valores que nos venden del FC Barcelona. Cuánta hipocresía.