La estrella de la liga de Emiratos Arabes Unidos y máximo goleador del campeonato, el africano Faisal Khalil, ha desatado una gran polémica en el país del Golfo Pérsico tras haber sido detenido junto con otro compañero de su equipo tras ser sorprendidos con dos hechiceros para que lanzaran un conjuro contra dos compañeros de su selección.
De hecho, ambos jugadores habían sido excluidos del combinado nacional poco tiempo antes. Durante esta práctica hubo sacrificios animales, automutilación, conjuros, guisos odiosos y amuletos. Por ello, el consejero de Deportes de Dubai ha asegurado que "se trata de un incidente aislado, no es una práctica común en Emiratos. Esas creencias no están permitidas por el Islam".
En este sentido, Khalil tenía el objetivo principal de ser fichado por el conjunto Al Yazeera, relacionado con el jeque que recientemente compró el Manchester City y que revolucionó el mercado futbolístico europeo este pasado verano. En el mundo árabe estas práctica están completamente prohibidas y en países como Arabia Saudí conlleva la decapitación.
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