Resulta que el reglamento de régimen interno del Barcelona dispone una serie de sanciones a sus futbolistas por llegar tarde a entrenamientos o partidos ¿Qué jugador dirían ustedes que fue el que más multas pagó en el Camp Nou el pasado curso por sus constantes retrasos? Sí, lo han adivinado, Gerard Piqué. El catalán llegó tarde a cinco entrenamientos de su equipo lo que le supuso una multa global de 3200 euros, según apunta Sport.
Piqué ganó la partida de las multas con aplastante superioridad sobre sus compañeros, pero no es menos cierto que los ‘valors’ de la puntualidad no fueron abrazados por el resto de la plantilla. Hasta seis jugadores del equipo culé se vieron envueltos en retrasos y multas a estas alturas del curso de la pasada campaña, ¿será que no contaban con buenos relojes para ser puntuales?
Neymar abonó 400 euros por sus retrasos, Adriano 1000 euros (con retraso a un entrenamiento y a un partido), Arda pagó 200 euros, los mismos que Jordi Alba, Mathieu y Aleix Vidal, respectivamente. Un ejemplo de profesionalidad en toda regla el de todos ellos.
A la finalización de la temporada, los jugadores del Barcelona pagaron un total de 11.000 euros en multas que, aunque se intente disfrazar como una anécdota desde la prensa pro-culé, no dejan de ser faltas de profesionalidad de futbolistas que ganan mucho dinero y a los que se les llena la boca de hablar de ‘valors’ ¡Los de la puntualidad no serán!
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