Otro crack que le pega un palo mortal al ‘piscinero’ Suárez

Éric Cantona se ha quedado a gusto con el delantero uruguayo y con el árbitro Aytekin, tras el robo al PSG en Champions


Suárez simula ante la presencia de Marquinhos

Suárez simula ante la presencia de Marquinhos




Siempre fue un jugador que nunca se mordió la lengua cuando se calzaba unas botas, de hecho una de ellas fue a parar en la cara de un aficionado. Aún así es uno de los mejores jugadores franceses, potente, talentoso y sobre todo con una personalidad única. Se trata de Éric Cantona, quién ahora ya retirado, ha opinado y de que manera contra el robo a mano armada que sufrió el PSG en el Camp Nou con Aytekin como mano ejecutora de la 'robomontada'.

En unas declaraciones recientes tras lo ocurrido, uno de los protagonistas que se lleva una de las mayores críticas de Cantona es Luis Suárez, se queda a gusto diciendo que: "Luis Suárez ha dejado de ser un mordedor, ahora es un saltador de trampolín. Uno no muy bueno, aunque sí muy teatral. Una trampa tan evidente con la mano en la garganta, una mirada de agonía. Es porno del fútbol, niños deberíais tener prohibido ver esto". Cantona no podría estar más en lo cierto, si los niños quieren aprender los valores del fútbol no debería tomar como válido lo que se vio en el Camp Nou. Para Cantona: "Algunos dirán que fue el milagro sobre el césped. Para otros fue el atraco del siglo. Solamente había 12 personas que creían en la clasificación del Barça: Neymar y los once jugadores del PSG".

Tremendas declaraciones de Cantona, aunque perfectamente válidas, como válido también es esa analogía del número siete que el francés señala, porque: "Siete minutos fue el tiempo que el Barça necesitó para marcar tres goles cruciales. Siete minutos es el tiempo que necesitó el defensa Serge Aurier para calzarse las medias cuando dejó de ser suplente en la liga francesa. Siete minutos es el tiempo que el Manchester City estuvo clasificado para los cuartos de final. Y también siete minutos es el tiempo medio de una relación sexual". Nadie se libra de los dardos de Cantona, bien tirados y con mucho fundamento de realidad.