La rajada de Dybala que no va a gustar a Messi

El de la Juve confiesa que es “difícil” jugar en la selección con su compatriota


Dybala - Messi

Dybala - Messi




Parece ser que para Leo Messi todo son malas noticias cuando se trata de la selección argentina. Y es que lo último en salir a la luz han sido unas declaraciones de un compañero suyo en la albiceleste en las que el jugador del Barça no queda muy bien parado. El autor de estas polémicas palabras ha sido Dybala, a quien precisamente el conjunto culé quiso incorporar este verano después de la marcha de Neymar al PSG.

Dybala habló en rueda de prensa antes del encuentro que juega este martes su equipo contra el Barcelona y le preguntaron sobre Leo Messi. El de la Juventus lo tuvo claro y respondió que jugar junto a él se le hace difícil porque le resta espacios y tiene que estar más pendiente de que Messi se encuentre a gusto más que de su propio rendimiento: “Puede parecer raro lo que voy a decir, pero es difícil jugar con él porque jugamos en la misma posición, aunque yo trato de respetar siempre su espacio y de ayudarlo desde donde puedo para hacerlo sentir cómodo", alegó Dybala.

Eso sí, acto seguido trató de arreglarlo para evitar que su compatriota le dé un buen tirón de orejas en la próxima concentración: “Por suerte, tengo la posibilidad de jugar con él en la selección y es un placer, puedo aprender muchas cosas de él. Messi juega en mi posición y puedo aprender muchas cosas de él, cómo interpreta el juego, cómo piensa, cómo ve los movimientos de los compañeros, eso me puede ayudar mucho en un futuro”.

No quiere oír hablar del Barça

Además, el nombre de Dybala apareció este verano vinculado con el del Barça ante el interés de los culés de hacerse con sus servicios, sobre todo tras la marcha de Neymar, pero finalmente no hubo tal fichaje. El argentino se quiso lavar las manos y echó balones fuera: “No sé lo que pasó durante el verano, es una pregunta para el club. A mí nadie me dijo nada, nunca me dijeron que hubiera una oferta y lo único que me dijeron es que me quieren aquí durante mucho tiempo. Estaré aquí mientras me quieran”.


Más 'calabazas' con el mercado cerrado

Giuseppe Marotta no tiene ninguna intención de abandonar la Juventus para iniciar una nueva y arriesgada aventura en un club en crisis como el FC Barcelona.

El director general de la Juventus ha rechazado la propuesta del Barça para incorporarse al organigrama culé: "Yo y Fabio Paratici (director deportivo 'bianconero') estamos muy bien aquí. Estamos consagrados a la Juventus y dedicados a tiempo completo. Estamos muy cómodos con Agnelli, Nedved, Allegri y el equipo. Hemos creado un modelo ganador. No se habla de la renovación del contrato, porque estamos prácticamente ligados de por vida a la Juventus, y si el club decidiese cambiar, tomaríamos una decisión. Pero no existe dicho supuesto porque la relación es idílica", aseguró Marotta.


Como es lógico, Marotta no quiere ni oír hablar de fichar por el FC Barcelona, y menos después de un verano que ha recalcado que el conjunto azulgrana tiene una directiva pésima incapaz de gestionar un club.

El ejecutivo de la Juventus también habló sobre la marcha de Bonucci y del abandono de Neymar: "la salida de Bonucci tiene un significado romántico, pero hemos cerrado la campaña de traspasos con un equipo que nos satisface. El Barcelona también ha debido afrontar la salida forzada de Neymar, en un periodo de mercado que estaba acabando y era difícil reemplazarle".

 

Pese al liderato, el Barça sigue siendo un polvorín

Al Barcelona no le anima ya ni que su equipo gane. Parece que sólo les puede sacar de ese enfado que su actual junta directiva dimita y eso es lo que gritaron antes, durante y después del partido. Además por si fuera poco, la moción de censura de Benedito cada vez tiene más apoyo.

Está líderes en la jornada tres, todo un hito desde luego, pero a pesar de todo esto el Barcelona sigue siendo un auténtico polvorín, una bomba de relojería que ya ni siquiera los resultados pueden parar. El enfado de la afición con la junta directiva tras el ridículo del verano en cuanto a los fichajes ha hecho estallar a los culés.