Tres años y seis meses de condena para Santos

De los ocho que pedía el fiscal





La juez Caridad Hernández condena a Santos Mirasierra como responsable de un delito de atentado a agentes de la autoridad con uso de instrumento peligroso en concurso ideal con un delito de lesiones y como autor de una falta de lesiones. Sin embargo, Mirasierra es absuelto del delito de desordenes públicos, del que también le acusaba el Ministerio Público -que pidió ocho años de cárcel-, ya que la magistrada considera que no se ha probado que el acusado tuviera voluntad de alterar la paz pública o se integrara en un grupo con tal finalidad, sino que por el contrario tuvo una conducta "individualista" y no lideró los altercados.

Igualmente, reconoce que no se ha acreditado que Mirasierra lanzara desde dentro de la bocana del estadio la silla que lesionó a un agente, aunque -pese a ello- explica que el acusado se encuentra entre el grupo de personas que reciben las sillas del exterior y las tiran a los policías, por lo que se le debe atribuir el resultado de esa acción como "coautor". En opinión de la juez, Mirasierra pudo ver como un grupo de personas estaba en la bocana y lanzaba sillas contra los policías y, pese a esa situación, se introdujo y permaneció en ese acceso a la grada unos cuarenta segundos, durante los cuales se lanzaron un total de diez sillas y una de ellas impactó en la frente del agente herido.

Por ese motivo, la sentencia estima que, atendiendo el principio de solidaridad, todos los miembros del grupo comparten la responsabilidad del resultado lesivo de la agresión y, por tanto, también el acusado, que ha sido por el momento el único localizado e identificado. Como hechos probados, la resolución judicial declara que el pasado 1 de octubre minutos antes del comienzo del partido entre el Olympique de Marsella y el Atlético de Madrid, Santos Mirasierra y otros aficionados del club francés forcejearon con los funcionarios policiales para evitar que retiraran una pancarta.

Minutos después se produjo una situación de confusión y enfrentamiento entre la Policía y los aficionados, durante la que el acusado propinó un fuerte empujón a uno de los agentes haciéndole caer al suelo, sin que se haya demostrado -según la sentencia- que pretendiera, como afirma la defensa, defender a una mujer francesa. Tras estos incidentes, la Policía termina retirándose de la grada mientras algunos aficionados intentan golpear con cinturones a los agentes, que finalmente se refugian en el interior de la bocana, donde se produce el mencionado lanzamiento de sillas.


Además de la pena de cárcel, el hispano-francés Santos Mirasierra es condenado por la falta de lesiones a una pena de multa de cuarenta y cinco días, con cuota diaria de cinco euros, y a pagar una indemnización de alrededor de 400 euros a los agentes lesionados. El Ministerio fiscal y la defensa, que había pedido la absolución del acusado, tienen un plazo de cinco días para recurrir la sentencia, y el condenado podrá solicitar cumplir la pena de prisión en Francia

Aguirre omite su valoración sobre el caso

Javier Aguirre, entrenador del Atlético de Madrid, no quiso entrar a valorar el caso Santos Mirasierra y las circunstancias del viaje que la próxima semana emprenderá el equipo a Marsella para enfrentarse al Olympique porque "el fútbol es deporte y no hay que llevarlo a otros ámbitos".

"El fútbol es deporte, un espectáculo, una diversión familiar y no hay que llevarlo a otros ámbitos. Se debe quedar ahí en el césped, en el estadio, y todo lo demás no viene a cuento", dijo Aguirre.

"A nadie nos agradan todas estas cosas que se generan al margen del fútbol o alrededor del fútbol. Ojalá todo sea normal. Nosotros vamos a jugar un partido de fútbol y nada más. No queremos que nada enturbie el partido que vamos a disputar en Marsella", finalizó Javier Aguirre.