El presidente de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), Joseph Blatter, anunció hoy que su organización decidirá a finales de 2010 tanto la sede donde se jugará la Copa Mundial de 2018 como la de 2022.
Blatter ofreció una rueda de prensa sobre la reunión que ha mantenido el comité ejecutivo de la FIFA en la capital de Japón, país donde se juega mañana la final del Mundial de Clubes entre el Manchester United y el Liga de Quito.
Blatter explicó en su comparecencia que los países de las confederaciones de fútbol de África y Suramérica no podrán optar a ser sede del Mundial de 2018, ya que la edición de 2010 se jugará en Suráfrica y la de 2014 en Brasil.
En cuanto a la edición de 2022, no podrán participar los países de la confederación de Suramérica ni los de la confederación del país elegido para organizar la edición de 2018.
En cuanto a las candidaturas europeas que se barajan, Blatter aseguró que el Reino Unido es un "candidato fuerte", pero que eso no significa que sea "el más fuerte", ya que otros países que también han mostrado interés "como España" también serían candidatos muy fuertes.
El presidente de la FIFA también se refirió a México, EEUU y Canadá como posibles candidatos por la confederación de Norteamérica y a Qatar, Japón y China por la asiática.
Blatter también se refirió a las consecuencias de la crisis económica mundial en el fútbol internacional y apuntó que será necesaria "la solidaridad" del fútbol con la sociedad.
A su juicio, el la FIFA debe estar "alarmada" por la situación de crisis y con las informaciones que se están produciendo, ya que la recesión económica ya ha afectado "a otros deportes como la Fórmula Uno y el cricket".
Sin embargo, apuntó que teniendo con cuenta que "el 98 por ciento de los recursos" de la FIFA llegan de la organización de los Mundiales de fútbol, la situación es "segura".
Blatter también se refirió a que la FIFA ha dado "un primer paso" en la protección de menores, "jugadores de entre 12 y 18 años" que a su juicio deberían estar "registrados" en las asociaciones de fútbol nacionales para que pueda haber un seguimiento y un "control de los agentes de jugadores".
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