Jesús Serna se convierte en el presidente y máximo accionista del Levante

Con el 70,3% de las acciones





Según López Lara, pues el verdadero propietario no ha comparecido, el futuro consejo de administración del Levante estará compuesto por Antonio Sánchez, Marcial Bustín, Ana Serna, Pablo López, Francisco Fenollosa (actual consejero), Santos Murillo y probablemente también Víctor Santamaría, actual portavoz. "Vengo con mi equipo a trabajar", ha repetido en varias ocasiones López Lara a pesar de que se ha identificado como intermediario y ha asegurado que no ocuparía ningún cargo directivo, "en un proyecto que consta de un apartado deportivo y otro inmobiliario que no se pueden desligar. Venimos a ganar dinero, lógicamente", ha dicho.

"Como proyecto deportivo únicamente no lo quiero. He tenido que meterlo con calzador dentro del asunto inmobiliario, porque aquí no se puede venir a especular, sí a ganar dinero", ha añadido. Además, ha dicho que el nuevo máximo accionista, Jesús Serna, "es un constructor particular que goza de la confianza de un grupo  inversor, que le ha colocado a su nombre el 70'3 por ciento de las acciones". "No existen cláusulas por las que se pueda echar atrás el proceso de venta", ha manifestado en varias ocasiones, al tiempo que ha calificado de "circo" la forma en la que se ha desarrollado el mismo.

"No sé si el balón es redondo o cuadrado"

"Aquí no se ha comprado un club, sino una deuda, y por tanto el que no venga con dinero, patina. Lo que queremos es quitarnos de encima cuanto antes a los administradores concursales, pero antes déjennos aterrizar y que conozcamos la deuda exacta, que oscila entre 82 y 85 millones", ha añadido. López Lara no ha informado de los detalles de la compra, ni tampoco del importe de la misma. Únicamente ha señalado que "se le ha pagado a Julio Romero (actual presidente) porque era el tenedor del 70'3 por ciento de las acciones". Preguntado por sus intenciones empresariales y la posible recalificación del estadio, este "intermediario" ha señalado que "las reuniones con el Ayuntamiento han ido divinamente. El Levante ocasiona problemas al Consistorio pero no tenemos garantías de recalificación, supongo que lo recalificarán. Construir un nuevo estadio nos llevaría tres o cuatro años".


Sobre el proyecto deportivo ha bromeado al asegurar "no sé si el balón es redondo o cuadrado", si bien ha añadido que "la meta es la Primera División". Por otra parte, se le ha preguntado por los contactos mantenidos con el ex portavoz del club, Quico Catalán, para su vinculación con la nueva directiva y ha afirmado que "contábamos con él, creíamos que nos podría ayudar, pero anoche me reuní con él y se opuso a la presencia de Emiliano Carballo (otro de los posibles nuevos consejeros y padre del actual gerente de la Fundación del Levante)". "Me dijo que no quería saber nada con todo lo que oliese a Pedro Villarroel, y eso no me parece bien. Si alguien quiere meter mano en mi proyecto que venga con millones", ha concluido.