El brasileño Diego vive un rifirrafe con policía por tráfico y alcoholemia

El Madrid le quiere





El centrocampista brasileño del Werder Bremen Diego tuvo este fin de semana un rifirrafe con la policía alemana, que le pilló con un índice de alcoholemia superior al permitido tras saltarse supuestamente varios semáforos en rojo. Según informa hoy el popular "Bild", el suceso se produjo sobre la una y media de la noche del sábado al domingo en el elegante barrio de Bremen Schwachhausen, donde fueron necesarios nada menos que tres patrullas de la policía para detener el vehículo que conducía el brasileño.

Diego había cenado con un par de amigos en un restaurante italiano del centro de la ciudad, a los que a continuación invitó a dar una vuelta en su coche, el potente modelo todoterreno de Volkswagen, "Tuareg". En un semáforo en rojo, el pequeño grupo salió del coche, lo rodeó danzando y siguió curso a toda pastilla por toda la ciudad.

Un transeúnte que fue testigo de la carrera y dijo ver cómo el coche se saltaba por lo menos un semáforo en rojo, avisó a la policía, que ordenó la persecución del automóvil. Finalmente, los agentes condujeron al futbolista a la comisaria, donde se le practicó una prueba de alcoholemia, de la que Diego salió con un índice de 0,8 miligramos por mil, tres décimas por encima del límite previsto por la ley. En declaraciones a "Bild", Diego admitió haber tomado "un par de copitas de vino, lo justo permitido por la ley".

Desde el punto de vista legal, Diego podrá conformarse con una multa y la retirada del carné durante un mes, además de algunos puntos de penalización en el registro central de Tráfico, pues al tratarse de niveles de exceso de alcohol relativamente escasos la legislación todavía habla de sanción y no de delito, lo que ocurre a partir de un 1,1 por mil. Por ver queda ahora cuál será la sanción que le impondrá su equipo, que en diciembre ya le multó con 20.000 euros y cuatro partidos de suspensión por agredir a un jugador en el campo.