Etoo, el agitador del 'guardiolismo'

El camerunés volvió a protagonizar otro escándalo y renueva su capítulo con la polémica





Guardiola, conocedor de la reprochable actitud del camerunés cuando algo se tuerce en su contra o se le cruzan los cables, dijo desde el día de su llegada que no iba a contar con Samu. La razón respondía a un tema simple y llano pero muy importante para el sistema que Pep quería implantar.

Le sobraban los tres pilares de la antigua hornada, Ronaldinho, Deco y Etoo. Se quitó de encima a los de habla portuguesa pero al africano no había quien lo moviera. El mister nunca escondió sus intenciones pero el jugador anduvo listo y supo esperar a la salida de sus compañeros ‘agitadores’ para, después, ganarse de nuevo el respeto del vestuario y, por supuesto, de un Laporta al que tiene como fans número uno.

Guardiola considera que en su concepto de bloque no hay hueco para el Etoo que escupe en el césped a sus rivales, para el que ‘raja’ contra sus colores cuando se le pregunta en tiempos de crisis ni para el que se estrella a altas horas de la madrugada con su deportivo de lujo. En la sesión del martes, un par de gritos de más, los avisos de su técnico y el nerviosismo del jugador, le llevaron a vestuarios antes de tiempo para meditar. No sabemos si lo hizo, pero en Montjuic este miércoles, pudo intentarlo desde las gradas.

El técnico, que ya preveía estos problemas, no está por la labor de tragar las niñerías del delantero, que puede alborotar ese remanso de paz que ha creado en torno a la institución. Y es que Pep ya tiene a su particular Lutero en rebeldía contra el ‘guardiolismo’ culé.