Tabares, que fue objeto de una falta en una jugada en la que el colegiado Martínez Franco le anuló el tanto, explicó que cuando estaba tendido sobre el césped, notó "que se iba la pierna hacia un lado y", dijo, "sabía que sería algo grave". "Estaba empezando a tener minutos, el míster confiaba en mi y también encontrando el camino del gol, por eso que tenía tanta bronca cuando me llevaban al vestuario y lloraba", dijo el argentino, que fue retirado en camilla por las asistencias médicas.
La lesión se produjo en el minuto 88, cuando el Castellón ganaba por un gol a cero, aunque el Huesca empató en la prolongación. "Ni me enteré hasta que fui a la clínica del resultado final. Me dolía tanto la pierna que solamente quería que me calmaran el dolor. Incluso pensaba que había pitado penalti, nunca falta", indicó. El próximo 30 de junio terminaba contrato Tabares, aunque todo está arreglado para que prolongue su vinculación con la entidad castellonense. "-La renovación- está hecha, el club me ha dicho que esté tranquilo y que me recupere. Aún me quedan muchas cosas que darle al Castellón", manifestó al respecto.
El jugador quiso agradecer el apoyo de la gente que le ha brindando su ayuda. "Estoy muy contento porque la gente de Castellón me ha demostrado su cariño y afecto. Ojalá que puedan disfrutar pronto con mis goles", concluyó José Carlos Tabares, que se despide de la temporada debido a la lesión.
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