El banquillo más 'caliente' del mundo

El argentino Abel Balbo llegó, dejó y regresó al Treviso en un día





Una práctica habitual pero sorprendente

Ocurrió en Palermo con Guidolin y Colantuono, también en Verona con el Chievo o en el Torino con el ex levantinista Di Biasi. Todos ellos han visto como se les proponía un proyecto a principios de campaña y, después de no colmar las expectativas o metas deseadas, eran cesados a mitad de campaña. Sin embargo, como el equipo seguía sin reaccionar, semanas o meses después regresaban por la misma puerta que les vio salir. En el caso del Palermo, además, la práctica se ha repetido varias ocasiones, lo que refleja una incompetencia total desde la directiva, incapaz de tomar decisiones lógicas a largo plazo.

Pues bien, esta semana la historia no ha seguido esos cánones pero igualmente se ha cebado con un técnico que ha soportado desplastes, perdones y críticas en sólo un día. La víctima ha sido, además, un auténtico ídolo del fútbol argentino, el ex goleador romanista Abel Balbo.

El ex internacional albiceleste firmó con el Treviso de la Serie B italiana. Fue nombrado técnico el pasado martes para sustituir a Luca Gotti, incapaz de sacar de la última plaza al equipo. Sin embargo, al saltar al césped para llevar a cabo su primer entrenamiento, los jugadores le hicieron un desplante y no se presentaron. Era una medida de presión a una directiva que no les paga desde hace meses y que tiene al equipo en quiebra con 10 millones de euros en pérdidas.


Este miércoles, a los diez minutos de estrenarse como técnico, Balbo dijo a la prensa que dimitía pues “no se dan las condiciones necesarias para permanecer en el equipo”. La situación, catastrófica, fue aún más grotesca cuando, horas después, el presidente del Treviso, Ettore Setten, anunció que ex delantero argentino había dado marcha atrás y tomaría las riendas del equipo.

Máxima locura en una historia sin igual que ya han denominado como ‘la telenovela de Treviso’.