Algo así sucederá este sábado con Klass Jan Huntelaar y John Heitinga, dos amigos que se cruzan por vez primera en el derbi madrileño. El rojiblanco ya sabe lo que es jugar un partido de este calibre a pesar de tener mal recuerdo de la Ida disputada en el Calderón, mientras el blanco, no sólo se estrena en estos partidos sino que, además, recuperará un lugar en el once inicial ya que el martes en Anfield no podrá jugar debido a su imposibilidad de participar en la Champions.
Ambos fueron hasta hace apenas unos meses las dos piezas básicas del Ajax, los dos jugadores nacionales que mantenían la casta en el cuadro de Ámsterdam y el corazón en momentos delicados. Uno era el defensa y capitán, el encargado de dar órdenes, de ejecutarlas en el césped y de dar la cara cuando las malas ‘guisas’ hacían acto de presencia. El otro, sin embargo, era el ‘killer’, el jugador clave de ataque y aquél que logró con sus números, mantener el tipo en tiempos de cólera para los ajaccied. Tan amigos son que incluso en la despedida de Huntelaar, el defensor acudió a la ciudad holandesa para darle su apoyo.
Por su demarcación en el campo, resulta fácil imaginar que ambos se cruzarán miradas en más de una ocasión puesto que uno busca hacer goles como jugador más adelantado y el otro desea evitarlos a toda costa desde la zaga más criticada de las últimas semanas.
Será un mini-partido de sentimientos, de amistades y de intenciones opuestas entre dos buenos amigos que durante noventa minutos se olvidarán de todo aquello para centrarse en una meta: tres puntos de oro en el derbi capitalino.
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