Lara, quien debutó en el banquillo de Colombia con derrota en Bogotá ante Paraguay (0-1), pero dejó una buena imagen con su equipo al lograr un empate sin goles ante Brasil, manifestó que no le gusta prometer nada, aunque sí espera lo mejor de sus pupilos.
"Lo único que quiero es equivocarme lo menos posible y esperar que el grupo de jugadores nos responda de la mejor manera", dijo.
Cumplidas diez de las dieciocho jornadas de las eliminatorias sudamericanas, Colombia ocupa la séptima plaza, a doce puntos del líder, Paraguay (23 puntos).
Sus próximos compromisos serán con Bolivia, el 28 de marzo, y Venezuela, el día 31.
Lara afirmó no sentir la presión de tener que salir a ganar los próximos dos partidos para aproximarse a la vanguardia de la clasificación y mantener las opciones de quedarse con una de las cuatro plazas directas o el derecho a una repesca con el cuarto de las eliminatorias en la zona Concacaf.
"Estoy tranquilo. Tengo mucha confianza en el grupo y de esa forma lo voy a asumir", enfatizó Lara, que apuntó que tampoco teme al fracaso en su desafío.
"Si no los saco (los puntos) y me tengo que ir, lo haré. Esa es una decisión de la Federación (Colombiana de Fútbol). Igual, vine a aportar al grupo", dijo el entrenador.
Sobre el choque con Bolivia, correspondiente a la undécima jornada de las eliminatorias, fijo un reto obligatorio: "Colombia necesita ganar de local para sumar".
De Venezuela, el próximo rival, destacó que tiene una fuerza joven, pero con muchos partidos internacionales en las divisiones de base.
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