Sub17: España se topó con el muro italiano

Sub17: España 0-0 Italia





Los chicos de Meléndez fueron los únicos que propusieron fútbol ante una Italia un tanto decepcionante en ataque y que apostó todo a una fornida defensa y a cazar alguna contra.

A España le faltó acierto y fortuna en el remate para materializar alguna de las oportunidades -alguna muy clara- para desnivelar el marcador y darle un giro a las pretensiones de los 'azzurini'.

Ficha técnica:

0 - España: Edgar Badía; Dalmau, Sergi Gómez, Muniesa, Blázquez; Kevin Lacruz (Cifo, m.69), Alex Fernández, Koke, Sarabia (Muniain, m.56; Isco (Sobrino, m.64) y Borja González.

0 - Italia: Perin; Natalino, Campoli, Camilleri, Sini; Fossati (Bianchi, m.66), Crisetig, De Vitis, Libertazzi (Finocchio, m.50), Beretta y El Sharaawy (Dell'Agnelo, m.75).

Árbitro: Vladislav Bezborodov (RUS). Amonestó a Dalmau.

Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo A del Europeo sub'17 disputado en el estadio Paul Greifzu de Dessau. Mañana desapacible, con lluvia y viento

Como el gol no llegó, el sistema defensivo de Pasquale Salerno creció en fortaleza e incluso al final en efectivos y España no encontró el camino de una victoria que mereció. Salvo los diez minutos iniciales del segundo tiempo, en los que Italia pareció más ambiciosa, el partido solamente tuvo una dirección casi constante, el área de la meta defendida por Mattia Perin.

España propuso su fútbol de toque, de calidad, para tratar de desequilibrar a una zaga en la que sobresalieron dos centrales de gran jerarquía, Alessio Campoli y Vincenzo Camilleri, quienes se las vieron con la principal referencia ofensiva española, el atlético Borja González, desacertado en el momento del remate.

El madridista Pablo Sarabia tuvo en sus botas el 1-0 a los 23 minutos, pero cuando ya se cantaba gol, el esférico rozó en Felice Natalino y no entró. Fue la principal ocasión de España para romper el partido, mientras que Italia apostó todo a los balones largos hacia los Giacomo Beretta, Stephan El Sharaawy y Alberto Libertazzi, pero el meta Edgar Badía estuvo siempre muy atento.

Tras el descenso, el cambio de actitud italiana duró poco, lo que tardaron Alex Fernández y Koke en hacerse de nuevo con el mando de las acciones. La entrada de Iker Muniain dio mordiente renovada a la 'roja' y la presión se incrementó notablemente.

Aunque Italia se defendía bien, España tuvo tres magníficas ocasiones en las que no hubo precisión e incluso en la última, de Rubén Sobrino, el meta Perin estuvo acertado, y el estreno se zanjó con un 0-0 injusto y que incrementa la dificultad de un grupo que ya se presentaba muy complicado, con Francia y Suiza en el horizonte.