La plantilla granota mantiene la huelga

El próximo rival





Si los jugadores del Levante siguen firmes en sus convicciones, el equipo granota no sería el rival del Madrid el próximo domingo. De momento, una de los razones principales para la disolución de la huelga, está lejos de cumplirse. Los futbolistas pretendían que se aumentara la cantidad que debía abonar el club, que en un primer momento se cifró en ocho millones de euros, gracias al aval del Ayuntamiento por el cincuenta por ciento y al otro aval que arañó la directiva a una financiera italiana. Ahora, y aunque públicamente los futbolistas no han dicho qué cantidad sería la ideal, el consejo estima que la petición está sobre los trece millones. Una cantidad a la que no van a llegar, al menos en tan poco tiempo. "Eso va a ser imposible”, reconocía a última hora de ayer noche el propio presidente, Julio Romero.

La Delegación de peñas lanzó ayer un comunicado en el que se respaldaba a los jugadores, y se destacaba la "incapacidad de los directivos". También, lanzaron una dura crítica hacia el Ayuntamiento: "La Delegación está harta de formalismos y buenas palabras que con el paso del tiempo se transforman en mentiras y promesas incumplidas lo que hacen que, a día de hoy, el Ayuntamiento carezca de credibilidad para el aficionado levantinista. Nuestros políticos nos han demostrado, también, su incapacidad".