España ofreció dos caras y sólo pudo empatar

EUROCOPA SUB 21: ESPAÑA 0-0 ALEMANIA





El conjunto español comenzó el partido con un caño de Sisi a Boenisch: una declaración de intenciones de lo que iba a ser la primera parte, en la que el único equipo que propuso algo fue el de López Caro, aunque por momentos amagó más que amenazó a Alemania.

El equipo de Hrubesch aceptó su inferioridad y entregó el campo y la pelota, confiando su suerte al poderío físico de sus centrales y a cazar algún contraataque, algo que hizo en un par de ocasiones, cierto es que con mucho peligro.

Fueron los alemanes quienes se acercaron primero, en un balón largo a la espalda de Sergio Sánchez que Özil transformó en un pase envenenado al centro del área desviado a córner por Torrejón.

Ficha técnica

0 - España: Asenjo; Monreal, Torrejón, Chico, Sergio Sánchez; Raúl García, Javi Martínez; Jurado, Granero (Pedro León, min. 87), Sisi (Capel, min. 70); Bojan (Xisco, min. 82).

0 - Alemania: Neuer; Beck, Höwedes, Boateng, Boenisch (Schmelzer, min. 38); Castro (Ebert, min. 85), Khedira, Aogo, Marin (Ben-Hatira, min. 70); Özil, Dejagah.

Árbitro: Tony Chapron (Francia). Amonestó con tarjeta amarilla, por Alemania, a Dejagah, Beck, Khedira; por España, a Torrejón y Raúl García.

Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo B de la Eurocopa sub 21 disputado en el estadio Gamla Ullevi de Gotemburgo ante unos 15.000 espectadores.

Pasado el minuto 15, España acentuó su dominio, con Javi Martínez mandando en el centro del campo y Sisi, que dejó en evidencia al tosco Boenisch -cambiado luego por lesión- en más de una ocasión. El extremo del Recreativo se sacó un gran balón interior a Sergio Sánchez, cuyo pase de la muerte fue desviado por la defensa alemana cuando Bojan esperaba para ejecutar a Neuer.

Bien sujeto por Boateng, notable todo el encuentro, Bojan tuvo que tirarse al medio del campo para recibir, y salvo en un par de detalles aislados no tuvo demasiada presencia en el juego, como tampoco la tuvo Özil en este período.

El talentoso atacante del Werder Bremen estuvo, no obstante, a punto de marcar en el minuto 35, tras recibir un balón del portero Neuer en un contragolpe y marcharse, escorado junto a la línea de fondo, de Sisi y Chico, pero Asenjo evitó el gol.

La ocasión alemana llegó poco después de otras dos muy claras de España: primero, Chico, solo dentro del área, no supo resolver frente a Neuer un rebote a tiro de Raúl García; y en el saque de esquina, Torrejón dejó el travesaño temblando de un cabezazo.

El equipo de López Caro siguió mandando, aunque acusó la falta de acierto de Granero, que en varias ocasiones se equivocó buscando el tiro lejano en vez de pasar la pelota.

Cuando el primer tiempo agonizaba, el veloz extremo Marin -lo mejor de una pobre Alemania en ese período- a punto estuvo de aprovechar otro contraataque, pero su tiro se fue lamiendo el palo.

Algo le debió decir Hrubesch a sus jugadores en el descanso, porque Alemania salió con otra actitud, ajustando las marcas, apretando a una España imprecisa y combinando arriba de la mano de Özil, que destapó todo su talento en la segunda parte.

Primero, Sergio Sánchez tuvo que sacar un balón comprometido tras una buena jugada de Castro y Özil; poco después, Özil le dio un gol en bandeja a Dejagah, que envió su remate por encima del larguero, y finalmente, el jugador del Werder Bremen aprovechó un resbalón de Chico para driblar a Asenjo, pero el regate le salió un poco largo y el portero del Valladolid sacó un gol cantado con la pierna.

López Caro buscó soluciones dando entrada a Capel por Sisi y corriendo al centro a Jurado, con Granero en la derecha, pero el cambio no resultó de mucho, porque España, que pegó un bajón físico importante, seguía haciendo agua en el centro del campo y ya no tenía ni claridad ni desborde arriba, y el control era de Alemania.

Asenjo se agigantó de nuevo y le sacó otro mano a mano a Özil y atrapó un tiro postrero de Ben-Hatira, demostrando por qué es el objeto de deseo de muchos equipos grandes y salvando un punto que mantiene a España con todas las opciones, aunque al final acabó dejando más dudas que certezas.